El icónico Obelisco de Buenos Aires está a punto de ofrecer una experiencia única para turistas y locales: un ascensor panorámico permitirá a los visitantes acceder a su cima y disfrutar de una vista privilegiada de la ciudad. Esta innovación busca potenciar el atractivo turístico del monumento sin alterar su estructura histórica.
Una transformación sin precedentes
Ubicado en la Plaza de la República, en la intersección de las avenidas 9 de Julio y Corrientes, el Obelisco ha sido un testigo de la historia argentina desde su inauguración en 1936. Hasta ahora, solo se podía acceder a su cima a través de una empinada escalera de siete tramos, con acceso restringido. Con la incorporación de un ascensor de tres caras vidriadas, se busca facilitar el acceso y ofrecer una experiencia inolvidable.
Detalles de la nueva estructura
El ascensor tendrá capacidad para cuatro personas y recorrerá los 67,5 metros de altura hasta el nivel más alto del monumento. Además, se instalará una escalera de emergencia externa para garantizar la seguridad de los visitantes. Tanto el ascensor como la escalera fueron prearmados en fábrica, lo que permitirá un montaje rápido y la posibilidad de ser desinstalados sin dañar la estructura original.
Un nuevo atractivo turístico
La iniciativa, impulsada por el Ministerio de Espacio Público e Higiene Urbana del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, busca transformar al Obelisco en un punto de observación exclusivo. Ignacio Baistrocchi, ministro del área, destacó que esta mejora permitirá a turistas y porteños redescubrir la ciudad desde una perspectiva inigualable.
Con esta renovación, el símbolo más emblemático de Buenos Aires deja de ser solo un icono histórico para convertirse en una experiencia de altura, invitando a vivir la ciudad desde un nuevo punto de vista.
