Hace dos años empezó a tomar forma este increíble proyecto que abrió sus puertas en marzo pero, recién ahora, quedó completamente terminado.
El museo está en un lugar poco común: las profundidades de Lanzarote, una de las islas del archipiélago canario, en España.
El «Museo Atlántico» es una exposición de más de 300 esculturas hechas por el arista inglés Jason de Caires y para recorrerlo hay que animarse a hacer snorkel o bucear entre ellas.
Las obras de arte están dispuestas sobre el lecho marino de la bahía Las Coloradas, cuyas aguas cristalinas hacen que sea un lugar perfecto, abarcando un área de 2.500 metros cuadrados.
Lo mejor de todo, es que el espacio se va a ir transformando a medida que la naturaleza haga su intervención porque las misteriosas figuras humanas sirven de refugio para muchas especies locales.
Las instalaciones está hechas de cemento «amigable con el ambiente» y representan escenas de la vida cotidiana, por ejemplo: una persona mirando televisión, un grupo caminando o una pareja tomándose una «selfie» submarina.