El icónico Puente Golden Gate de San Francisco ha sido testigo de innumerables tragedias a lo largo de los años, con alrededor de 2.000 personas que han optado por saltar al vacío desde sus 67 metros de altura. Después de décadas de lucha y presión por parte de las familias de las víctimas, la instalación de una red de acero de 217 millones de dólares está casi completa. Este sistema, destinado a disuadir y atrapar a quienes aún intenten saltar, se extiende a lo largo de 3,5 millas del puente, cerca de 20 pies debajo de la acera.
La construcción de esta red, destinada a ser un «sistema disuasorio de suicidios«, ha tardado más en completarse que la construcción original del propio puente. Aunque casi invisible a la distancia, estas redes de acero inoxidable están diseñadas para soportar las duras condiciones climáticas a las que el Puente Golden Gate está expuesto, incluyendo lluvia, viento, sal y niebla.
Si bien la implementación de este sistema ha demostrado ser en su mayoría efectiva, aún no es una solución perfecta. Algunas personas han logrado saltar sobre las redes, y lamentablemente, algunas han logrado saltar al vacío incluso después de haber caído en ellas. Los funcionarios del puente señalan que se necesitará uno o dos años más de datos para comprender completamente la efectividad del sistema.
Después de décadas de indiferencia burocrática y resistencia, la culminación de este proyecto ha generado una mezcla de emociones entre los involucrados. Para muchos, esta medida ha llegado demasiado tarde, mientras que para otros, es un alivio que finalmente se haya dado este paso tan necesario para prevenir futuras tragedias.
Si estás luchando con pensamientos suicidas, llama o envía un mensaje de texto al 988 para comunicarte con la Línea de vida y crisis por suicidio, o visita SpeakingOfSuicide.com/resources para obtener una lista de recursos adicionales.
