Durante años, Suecia ha sido sinónimo de innovación, bienestar y equilibrio. Pero ahora, el país nórdico da un paso más audaz: se convierte oficialmente en una “receta médica”. A través de la campaña “The Swedish Prescription”, impulsada por Visit Sweden, Suecia propone que su entorno natural, su cultura y su estilo de vida sean considerados auténticos tratamientos para el cuerpo y la mente.
No se trata de un simple eslogan turístico. La propuesta cuenta con aval científico: vivir al estilo sueco puede ser tan beneficioso como un tratamiento médico. La iniciativa fue desarrollada junto a la profesora Yvonne Forsell, especialista en medicina social, quien colaboró en la creación de un documento descargable que simula una receta médica real. En ella se incluyen actividades y experiencias inspiradas en los paisajes, tradiciones y costumbres suecas.
Las “dosis recomendadas” van desde caminar entre abedules, sumergirse en lagos, cenar sin pantallas o disfrutar del fika, la clásica pausa para el café que simboliza el arte sueco de desacelerar. Cada sugerencia está respaldada por estudios que demuestran los efectos positivos del contacto con la naturaleza, la desconexión digital y la vida social tranquila.
“La investigación ha demostrado que estar en la naturaleza, desconectar del ritmo urbano o compartir momentos sencillos tiene un impacto real en el bienestar. En eso, Suecia tiene una ventaja natural y cultural”, explica Forsell.
Más que una invitación al turismo, The Swedish Prescription es una prescripción para reconectar con uno mismo. En un mundo dominado por el estrés y la inmediatez, Suecia se posiciona como un país que ofrece una terapia sin efectos secundarios: respirar aire puro, contemplar el paisaje y convivir sin prisa.
Con esta campaña, Visit Sweden continúa su línea de acciones creativas y con propósito. Tras haber propuesto un acuerdo con Suiza para evitar confusiones entre ambos países y querer registrar el nombre “Sweden” en 2022, el país redefine ahora su identidad como modelo de salud integral, sostenibilidad y felicidad colectiva.
Suecia demuestra que el verdadero lujo del siglo XXI no está en el consumo, sino en el bienestar. En sus bosques, lagos y silencios, cada experiencia se convierte en una dosis de salud.

