Con temperaturas que alcanzan niveles récord este año, todos están haciendo todo lo posible para escapar del calor abrasador del verano. Y cuando se trata de escapar del calor, a veces simplemente encontrar una sombra puede ser una bendición. Ahí es donde entran en juego los toldos, sombrillas y marquesinas.
En lugar de erigir un dosel de plástico como suele hacer, la ciudad española de Málaga ideó una forma más creativa y respetuosa con el medio ambiente. Hace tres años, el Departamento de Medio Ambiente de la ciudad contrató a la maestra de crochet local Eva Pacheco, quien junto con sus alumnos tejieron un toldo enorme y colorido que recorre el distrito comercial de Málaga. Pacheco y sus estudiantes agregan nuevo material a la sombrilla existente cada verano, y actualmente cubre una enorme área de 500 metros cuadrados.
Este es el tercer verano consecutivo que la emblemática calle Málaga de Alhaurín de la Torre luce el gran y colorido toldo de ganchillo elaborado por el taller de croché y material reciclado que organiza la Concejalía de Medio Ambiente del Ayuntamiento.
Esta obra de arte está formada por las piezas elaboradas durante el primer y el segundo año, y por las nuevas piezas que se han tejido a lo largo de este tercer taller, por lo que abarca una mayor anchura que años anteriores. En total, cubre una superficie aproximada de quinientos metros cuadrados y un tramo de unos 60 metros de longitud entre la farmacia y la plaza del Conde.
¡Echa un vistazo al impresionante dosel colorido en la galería a continuación!
