Explorador urbano ‘irrumpió en la isla de Jeffrey Epstein’ logrando captar imágenes extremadamente extrañas

Little Saint James
Redactora Social
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Un explorador urbano que afirmó que «irrumpió en la isla de Jeffrey Epstein» dijo que «tuvo mucha suerte» después de lograr esquivar a los guardias de seguridad y las cámaras.

Hace unos años, Andy Bracco, también conocido como el ‘hacker del lugar’, fue a la isla privada de Epstein, Little Saint James, junto con su amigo Jon Megna.

La pareja logró desembarcar en la antigua escapada privada de Epstein, ubicada en las Islas Vírgenes de EE. UU., y documentó su aventura en YouTube y TikTok.

El metraje los muestra explorando lugares emblemáticos del paraíso tropical de 30 hectáreas de 64 millones de dólares del delincuente sexual multimillonario, incluido el gigantesco reloj de sol, así como el ‘templo’ azul y blanco que se encuentra en la cima de una colina.

En declaraciones a The Sun en 2020, Bracco dijo que la isla todavía estaba patrullada por guardias de seguridad.

Él dijo: «Hay seguridad activa allí: visité el sitio dos veces durante la semana y una de las veces fue durante el día, lo que fue un poco más arriesgado».

«La ruta que tomamos evitamos muchas de las cámaras en la isla, junto con los trabajadores y los guardias».

«Tuvimos mucha suerte. Pero lo planeamos con unos meses de anticipación, hablamos con los lugareños y sabíamos a qué nos enfrentábamos».

«No sugeriría que nadie vaya allí a menos que realmente sepa lo que está haciendo».

La isla fue allanada en 2019 por el FBI luego de las acusaciones de tráfico sexual y prostitución menor de edad por parte de Epstein, quien murió en su celda mientras esperaba el juicio.

Bracco también dijo que él y Megna notaron que parte de la construcción en la isla supuestamente lujosa en realidad no estaba a la altura, incluido el templo, donde un techo se había volado, así como puertas falsas con monogramas que tenían pintadas las iniciales de Epstein.

Continuó: «Es muy extraño saber cuánto dinero tenía este tipo para ver una estructura de tan baja calidad allí».

«Te hace pensar, ¿es esto una distracción de otra cosa?».

En un momento, Bracco y Megna se encontraron con una cámara de seguridad que parecía estar todavía activa.

«Hubo una parte súper seria cuando no tomamos en cuenta lo que creo que era una cámara infrarroja en la torre de comunicaciones», dijo.

«Estaba apuntando directamente hacia nosotros, y si hubiera un sensor frente a nosotros y dependiendo del software que tuvieran, podría haber activado una alarma. Así que tuvimos que salir corriendo bastante rápido».

En otra entrevista con Newsweek, Bracco afirmó que miró dentro del templo azul y blanco y vio una escalera que descendía hacia abajo, y los teóricos de la conspiración especularon durante mucho tiempo en línea que el edificio cubría una red subterránea de túneles.

Él dijo: “Si hubiera entrado en el templo abierto, con el que claramente entré en contacto cercano, nunca me incriminaría mostrando a mi audiencia cómo entré. Entrar me habría permitido acceder a los túneles.

“La seguridad definitivamente existió en la isla durante mis dos visitas. Los meses de esfuerzo que se dedicaron a planificar solo unas pocas horas de exploración son muy desproporcionados. Tomé en cuenta tantas cosas, pregunté tantos recursos disponibles como sentí que necesitábamos saber mientras aún intentaba permanecer en secreto».

“En mis dos visitas permanecimos completamente desapercibidos debido a que seguimos nuestra cuidadosa planificación y otros procedimientos de entrada encubierta. Nos mantuvimos alejados del muelle principal, la casa principal y las cámaras infrarrojas”.

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