Un año más, el certamen internacional de fotografía Drone Awards revela cuáles son las instantáneas aéreas galardonadas por sus imponentes vistas.
No hay dudas de que el mundo de la fotografía se ha visto irrumpido positivamente a partir de los impresionantes planos cenitales y las espectaculares panorámicas que han de ser capturadas gracias a la presencia de los drones, artefactos aéreos que llevan consigo una cámara y que ejercen su función de manera remota.
Por su parte, Drone Awards, que conforman a su vez la sexta edición de los Siena International Photo Awards, consiste en un concurso fotográfico que, por tercer año consecutivo, ha premiado a los artífices de las mejores postales capturadas con dron del 2020.
Curiosamente, aunque muy merecido, la obra ganadora de los Drone Awards 2020 ha sido ‘Love Heart of Nature’, una fotografía aérea tomada por el fotógrafo australiano Jim Picôt, que fue seleccionada entre un amplio catálogo de imágenes registradas por fotógrafos de 126 países.
La fotografía ganadora ha capturado un precioso banco de salmones en Australia. Incluso, en el interior del corazón azul oscuro formado por peces se puede apreciar la figura de un tiburón nadando. Apreciada por sus tonalidades como por la armonía de la escena, Jim Picôt -reconocido como el mejor fotógrafo del año- ha sabido retratar la belleza de la naturaleza en su estado más puro:
En cuanto a las categorías participantes del concurso, fueron precisamente nueve y se destacaron por los siguientes conceptos: Enclaves naturales, gente, paisajes abstractos, ciudades vacías, arquitectura urbana, boda, vida durante el Covid-19, animales y series.
En la categoría de ‘Abstractos’, el fotógrafo Paul Hoelen, de Nueva Zelanda, se ha ganado el primer puesto gracias a ‘El resurgir del fénix’, una imagen aérea tomada en el centro de California y dedicada al evocador proceso de regeneración del enclave minero del Lago Owens:
Por su parte, ‘Black Flag’ del fotógrafo israelí Tomer Appelbaum ganó en la categoría ‘Ciudades vacías: la vida bajo la Covid-19’, debido al impactante registro de miles de israelíes que mantienen la distancia social impuesta por las restricciones sanitarias en Tel Aviv, durante una protesta contra el Primer Ministro Netanyahu el 19 de abril en la plaza Rabin:
En la categoría ‘Naturaleza’, el fotógrafo mexicano Joseph Cheires se ha llevado la medalla de oro gracias a la magnífica imagen ‘La ballena gris juega a empujar a los turistas’, tomada en Puerto Adolfo López Mateos, Baja California (México):
La fotografía aérea ‘Tierra Helada’ tomada por la suiza Alessandra Meniconzi es la ganadora en la categoría ‘Personas’. La estampa es una oda a la vida invernal diaria en la estepa euroasiática -donde se alcanzan temperaturas inferiores a 30°C-, así como a los viajes a través de ríos y lagos congelados:
Para la categoría de Deportes, E¿el fotógrafo italiano Roberto Corinaldesi conquistó el primer puesto con ‘En el mar’, que inmortaliza, a vista de pájaro, a personas nadando entre la espuma blanca de las olas de Cornualles:
Las tomas tituladas ‘Mares vacíos y costas atestadas’ del fotógrafo indio Srikanth Mannepuri obtuvieron el reconocimiento de la categoría de ‘Serie’. A través de una secuencia de imágenes tomadas en India, se cuenta la historia de una vida marina que sufre en silencio, siendo incapaz de resistir el consumo excesivo de pescado.
En la categoría ‘Urbana’, el fotógrafo polaco Tomasz Kowalski ganó con ‘Estructura alienígena en la Tierra’. En la instantánea se aprecian las Torres Petronas, los dos impresionantes rascacielos gemelos de Kuala Lumpur, desde una potente perspectiva:
Por otro lado, el fotógrafo oriundo de Maldivas, Mohamed Azmeel, ha sido coronado en ‘Boda’, una de las nuevas categorías de esta edición junto a la que hace referencia a la crisis sanitaria. ‘Tropical Bride’, realizada en Maldivas, es el resultado de la combinación de un espectacular paisaje con una creativa puesta en escena, para la que se han utilizado flores y hojas sobrantes de los adornos de la boda.
La categoría de ‘Vida salvaje’ premió al fotógrafo ruso Dmitriy Vilyunov, quien ha sido galardonado por ‘Donde viven las garzas’, que inmortaliza sus nidos en las copas de los árboles:
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