Google trabaja para ayudar a detectar terremotos a través de los teléfonos celulares que funcionan con el sistema operativo Android. Las personas recibirán alertas anticipadas para así poder evitar una catástrofe o reducir sus consecuencias.
Según informa la agencia Reuters, desde el 11 de agosto los teléfonos ya empezaron a detectar sismos en diferentes lugares del mundo. De esta manera van a proporcionar datos que podrían advertir a millones de usuarios en caso de que haya algún temblor cercano a su ubicación. En una situación así, cada segundo cuenta.
El estado de California, en Estados Unidos, es el primer lugar en el que se implementó el sistema de alerta.
¿Cómo funciona?
El sistema utiliza el acelerómetro del móvil para detectar si existen vibraciones y las compara con personas que se encuentran en la misma ubicación, o cercana a ella. Además, funciona cuando el teléfono no está en uso.
Los acelerómetros son sensores que miden la dirección y la fuerza del movimiento, son utilizados por el dispositivo para determinar si el usuario lo está sosteniendo de modo horizontal o vertical.
En caso de detectar algún tipo de vibración terrestre, Google comparará los datos con otros teléfonos para verificar si se trata o no de un terremoto y, en caso de confirmarlo, envía la notificación de alerta.
“Los terminales de Android funcionan como pequeños sismógrafos”, declaró Marc Stogaitis, ingeniero de Google.
El funcionamiento del alerta variará dependiendo de la ubicación de la persona y la respectiva distancia con el epicentro de la vibración. Si bien estos datos se comparan entre sí, tanto la ubicación como la información aportada por el acelerómetro se dan de forma anónima. Según los expertos, no es necesario tener la ubicación exacta sino que basta con una aproximación.
Proyecto a largo plazo
El detector de sismos de Google está planteado a través de diferentes etapas. En primer lugar, la primera fase incluye a los usuarios de California. En este caso no se utilizará la tecnología de los teléfonos móviles, sino que la compañía trabaja en conjunto con el Servicio Geológico y la Oficina de Servicios de Emergencias.
En las próximas etapas, serán incorporados los datos de los teléfonos móviles para ir perfeccionando las alertas cada vez más.
Según expertos en sismología que fueron consultados por la empresa del buscador, convertir los teléfonos en mini-sismógrafos es un gran avance pero, al mismo tiempo, es inevitable la posibilidad de tener alertas erróneas hasta que logren mejorarlo de a poco.
