Cada 7 de diciembre, la ciudad medieval de Gubbio, en Italia, se ilumina con un espectáculo único: el árbol de Navidad más grande del mundo, reconocido por el Libro Guinness de los Récords. Este ícono navideño, que lleva deslumbrando desde 1981, transforma el Monte Ingino en un lienzo de luces y color, visible desde kilómetros de distancia.
Con más de 850 luces que se extienden a lo largo de 650 metros de altura y abarcan un área de 130,000 metros cuadrados, este árbol no es solo una maravilla visual, sino un tributo al espíritu comunitario de Gubbio. La estructura combina perfectamente con la arquitectura histórica de la ciudad, comenzando en las murallas medievales y culminando con una imponente estrella junto a la Basílica de Sant’Ubaldo, en la cima del monte.
La instalación de este coloso luminoso es una labor titánica que depende del esfuerzo de un grupo de voluntarios locales, quienes cada año se encargan de montar y desmontar las luces. Su dedicación convierte este árbol en un símbolo de unidad y orgullo para la comunidad.
La ceremonia de iluminación atrae a turistas de todo el mundo, que acuden a Gubbio para ser testigos de este evento mágico. Además, el encendido suele estar acompañado de actividades culturales, mercados navideños y una atmósfera festiva que transforma la ciudad en un destino imperdible durante la temporada.
Visitar Gubbio en diciembre es sumergirse en una experiencia inolvidable donde la tradición, la belleza y el espíritu navideño se encuentran en perfecta armonía.
