El explorador ExoMars Trace Gas Orbiter, también conocido como TGO, ha encontrado evidencia de importante presencia de agua bajo la superficie de Marte.
El pasado miércoles,, 15 de Diciembre de 2021, la Agencia Espacial Europea (ESA) anunció que el explorador había encontrado «cantidades significativas de agua» en Valles Marineris, en Marte. Este espacio se trata de una región que es como Países Bajos y está ubicada en el centro del enorme sistema de cañones que posee el planeta rojo.
El increíble hallazgo tuvo lugar a tan solo un metro por debajo de la superficie del cañón, cerca de Candor Caos, un área del sistema de cañones que se cree que puede ser prometedor para la búsqueda de agua en Marte. Vale destacar que este sistema de cañones que se encuentra en el planeta rojo es unas 10 más largo, 5 veces más profundo y hasta 20 veces más ancho que el Gran Cañón de Estados Unidos, según informó el sitio de noticias CNN, como para tomar noción de su dimensión.
El explorador, por su parte, fue lanzado en el año 2016 para una misión realizada en conjunto entre la Agencia Espacial Europea y Roscosmos, y el agua fue detectada por un instrumento suyo llamado FREND, que puede rastrear el hidrógeno en el metro más alto de la superficie de Marte.
Lo que hizo FREND en este caso fue mostrar que hay un espacio que posee una cantidad enorme de hidrógeno dentro del sistema de cañones de Valles Marineris, «asumiendo que el hidrógeno que vemos está unido a moléculas de agua, hasta el 40% del material cercano a la superficie en esta región parece ser agua», explicó Igor Mitrofanov, quien forma parte del Instituto de Investigaciones Espaciales de la Academia de Ciencias de Rusia.
Según explicaron los científicos, lo más probable es que en términos generales el agua se encuentre en forma de hielo, y que normalmente suele a evaporarse por la temperatura. Para que eso no suceda, se tiene que dar una combinación de temperatura, presión e hidratación y eso es lo que parecería estar presente en el hallazgo más reciente. «Este hallazgo es un primer paso asombroso, pero necesitamos más observaciones para saber con certeza qué tipo de agua estamos tratando», dijo Hakan Svedhem, de la Agencia Espacial Europea.