La corrida de casa al trabajo, la disposición corporal correcta para levantar peso durante la apertura de una tienda, la velocidad necesaria para que no nos cierre la puerta del subte en la cara: aunque no nos parezca así, podríamos definir algunas de estas acciones como formas de resaltar el ‘espíritu olímpico’ nuestro de cada día. Inspirado en la celebración de los JJOO de Tokio, el ilustrador Adrian Hogan ha creado una serie de ilustraciones que dan cuenta cómo la disciplina y la fortaleza nos invade en el día a día, aún sin necesidad de estar compitiendo por una medalla.
Los Juegos Olímpicos de Tokio, que debían haberse celebrado el año pasado y se retrasaron unos cuantos meses como consecuencia de las restricciones sanitarias ocasionadas por la pandemia, han sido ansiosamente esperados. De hecho, tan larga parece habérsenos hecho la espera que muchos han recibido la competición deportiva con más ganas.
En una propuesta de ilustración de situaciones bastante cotidianas al común de las personas, Adrian Hogan ha creado una serie de ilustraciones que demuestran que no es necesario ser un deportista de alto rendimiento para ser poseedor del espíritu olímpico, algo que definitivamente nos puede acompañar en nuestro día a día.
De esta manera, sus diferentes entregas visuales forman la colección que muestra cómo las prisas por no perder el metro pueden convertirse en una carrera de velocidad, el levantar las persianas de un negocio puede suponer una prueba de fuerza o esquivar un charco tras la lluvia puede ser un salto de longitud como el que realizan los atletas en el estadio.
A continuación te compartimos algunos de los mejores retratos para que puedas descubrir cuál de todas las prácticas deportivas habita inconscientemente en tu día a día. Y si quieres conocer más sobre su trabajo, puedes ver en su perfil de Instagram @adehogan:
