Una hazaña histórica: una mujer estadounidense se convirtió hoy en la primera persona que cruza el canal de la Mancha a nado cuatro veces sin parar.
Sarah Thomas, de 37 años, recorrió en exactamente 54 horas y 10 minutos las frías aguas que separan Francia del Reino Unido. Si bien el recorrido debía ser de unos 130 km, pero a causa de las fuertes mareas terminó nadando cerca de 210 km.
Pero la historia de Sarah es realmente apasionante: hace exactamente un año se recuperó de un cáncer de seno. Por ello decidió dedicar su gran logro a todos aquellos sobrevivientes, como ella.
«Esto es para aquellos de ustedes que comienzan su lucha con el cáncer y aquellos de ustedes que superaron el cáncer dejándolo lejos en el pasado, y para todos los que están en medio», destacó la mujer.
El nadador de resistencia Lewis Pugh alabó en Twitter su proeza, calificándola de «extraordinaria, asombrosa, sobrehumana».
La mujer reconoció a la BBC que lo más difícil de las travesías fue el agua salada, que le irritó la boca y la garganta, y también le picó una medusa en la cara. Al llegar a la orilla en Dover, Inglaterra, dijo: «No puedo creer que lo hicimos».
«La verdad es que tengo todo (el cuerpo) bastante entumecido. Había mucha gente en la playa reunida para verme y desearme lo mejor, y fue muy amable de su parte, pero me siento mayormente aturdida», afirmó.
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A diferencia de lo que muchos de nosotros hemos acostumbrado a hacer desde pequeños, Matías comenzó a nadar a los 21 años.
Y el zambullirse adentro del agua tiene como razón principal una cuestión de salud: curarse el asma. Pero quizás fue una decisión que lo salvó de muchas otras cosas: “Aprendí a nadar para curarme el asma, y es en ese momento cuando empiezo a practicar este deporte maravilloso en el cual encuentro mi nuevo mundo“.