Esta ciudad es un destino tan completo y versátil, que a pesar de que sus playas sean uno de los principales atractivos, hay muchas actividades para realizar bajo techo que garantizan la diversión. Desde Intriper, te contamos las 7 cosas para hacer en Río de Janeiro cuando llueve.
Desayunar en Cafetería Colombo
Una de las confiterías más bonitas del mundo es sin dudas la deslumbrante Confitería Colombo, símbolo de la Belle Époque carioca. Situada en el centro de Río, es un plan favorito cuando llueve, ya que el visitante no sólo quedará fascinado con el techo vidriado apenas cruza la puerta, sino que vale la pena dejarse tentar por su oferta gastronómica de tentempiés dulces y salados.
Fundada en 1894 por los inmigrantes portugueses Joaquim Borges de Meireles y Manoel José Lebrão, hoy detenta el título de Patrimonio Histórico y Artístico del Estado de Río de Janeiro.
Los amplios salones están decorados con enormes espejos belgas cuyos marcos son de madera de jacarandá finamente tallada. Sobre el salón de té una enorme claraboya con vitrales pintados da al conjunto un esplendor único.
Fue y será el punto de encuentro de políticos, periodistas, poetas y artistas, siendo las más destacadas visitas la del Rey Alberto de Bélgica en 1920 y la Reina Elizabeth de Inglaterra en 1968
Entre las especialidades se recomiendan los bocadillos, cuyo precio varía entre los U$S 9 a los U$S 10 y los waffles que rondan los U$S 6. Pero lo ineludible allí es probar los batidos de leche: los hay de crema, soda y guayaba fría y cuestan alrededor de U$S5.
Recordá que los lunes permanece cerrado y que la cocina cierra a las 19 hs.
Admirar la realeza del Gabinete Portugués de Lectura
El Real Gabinete Portugués de Lectura es una enorme, fastuosa y espectacular biblioteca y centro cultural. Alberga más de 350 000 ejemplares de libros, entre los que se encuentran obras de gran valor relativas a la cultura en lengua portuguesa.
Fue elegida por la revista Time como la cuarta biblioteca más hermosa del mundo. Fundada en 1837, se introdujo por primera vez en Río de Janeiro después de que la familia real portuguesa se instalara en Brasil.
La entrada es totalmente gratuita y abre de lunes a viernes de 10 a 17hs.
Recorrer el Parque Lage
Situado en el Parque Nacional de Tijuca, es un precioso parque de estilo europeo enclavado a los pies del Cristo Redentor del Corcovado. Cuenta con una extensión total de 52 hectáreas de jardines alrededor de un “Palacio Romano” y su origen se debe a una historia de amor y arte.
¿Pero por qué te mandamos ahí si llueve? Por que ya desde el principio, el camino que conduce al palacio está rodeado de exuberantes palmeras, y a medida que caminás la vegetación se vuelve tan tupida que simula una verdadera selva, por lo que las mismas plantas ofician de protección al visitante.
La imagen es perfecta: caminos sinuosos que se internan en la vegetación, puentes, lagunas, islas, miradores hechos de roca e incluso cuevas y grutas artificiales. Todo ello creado para darle al parque el encanto de los jardines románticos ingleses. La sorpresa son los acuarios incrustados en las paredes de una de esas grutas artificiales, donde pueden verse varios tipos de peces, principalmente especies autóctonas de los ríos brasileños. Además, es común cruzarse con monos y tucanes jugueteando y alimentándose tranquilamente entre la vegetación.
Con respecto a la mansión, hay que decir que fue diseñada por el arquitecto italiano Mario Vodrel, en un estilo ecléctico. Consta de una sola planta rectangular con un enorme pórtico frontal y grandes arcos y columnas, donde todas las dependencias y salones giran en torno a una piscina central. Dentro, funciona la Escuela de Artes Visuales.
Estos parques fueron diseñados por el paisajista inglés John Tyndale, quien se inspiró en las villas europeas de la época. Más adelante, hacia 1920, el empresario y amante de las artes, Henrique Lage, reformuló los jardines y les dio un diseño más romántico para homenajear a su esposa.
La entrada al parque es gratuita y se puede recorrer diariamente de 8 a 17 y en verano hasta las 18 hs. Si sos un amante de las caminatas y estás entrenado, hay un sendero de importante dificultad que te lleva hasta el Cerro Corcovado.
Visitar el Museo del Mañana
El sorprendente diseño del Museo del Mañana es la primera gran obra en Latinoamérica del famoso arquitecto español Santiago Calatrava, quien afirma que se inspiró para su creación en las bromelias del Jardín Botánico.
El edificio de 15.000 metros cuadrados, que parece flotar delicadamente sobre la Bahía de Guanabara, se ha construido siguiendo estrictas normas de sustentabilidad, lo que le ha merecido el Certificado Leed (Liderazgo en Energía y Proyecto Ambiental), concedido por la organización internacional Green Building Council.
Entre las particularidades arquitectónicas de este museo, están las formas curvas y blancas que caracterizan los diseños de Calatrava. El español ha instalado una cobertura móvil pensada para aprovechar al máximo la luz natural. Esta, a su vez, alberga una impresionante estructura de acero que forma una hilera de “alas” recubiertas por más de 5.400 pequeñas placas solares que durante el día parecen batirse en busca del sol para generar la energía limpia que abastece el edificio.
Además, los 9.200 metros cuadrados de espejos de agua que forman la base del museo, se nutren con las aguas de la bahía de Guanabara, al igual que todo el sistema de refrigeración del edificio.
En el interior, el área expositiva del Museo del Mañana de Santiago Calatrava está dividida en 5 secciones: Cosmos, Tierra, Antropoceno, Mañanas y Ahora. La idea es que los visitantes puedan hacer un recorrido temporal por la historia del universo y en especial de nuestra tierra desde su formación, pasando luego por la aparición del hombre y su impacto sobre ella
El Museo está abierto de Martes a domingo de 10 a 18 hs.
El precio de la entrada es de U$S 1,90 para niños y jóvenes de 6 a 21 años de edad; estudiantes de escuelas privadas; estudiantes universitarios; profesores de escuelas privadas; personas con discapacidad; servidores públicos en el municipio de Río de Janeiro; residentes o nativos de la ciudad de Río de Janeiro; titulares de la tarjeta de carnet joven; clientes del Banco Santander (pago con tarjeta Santander, válido solo para el titular de la tarjeta).
La entrada es gratis para mayores de 60 años, niños menores de 5, profesores de escuelas públicas, estudiantes de primarias y secundarias, acompañantes de personas con discapacidad, guías turísticos, vecinos del museo y empleados de otros museos, empleados de SHELL y de Santander. Niños de hasta 5 años, personas mayores de 60 años, estudiantes de centros públicos de primaria y secundaria.
Pernoctar en AquaRio
AquaRio, es el nuevo acuario de Río de Janeiro, un lugar impresionante que se ha convertido en una de las principales atracciones para realizar cualquier día, incluso cuando llueve. Se trata de una de las obras creadas dentro del proceso de renovación y recuperación del casco histórico, en ocasión de los Juegos Olímpicos del 2016.
El acuario no es sólo un lugar de exhibición y entretenimiento, sino también un centro de divulgación, investigación y protección de la vida marina. Cuenta con 26.000 m2 de área construida, más de cuatro millones y medio de litros de agua de mar y una capacidad para albergar hasta 8.000 animales marinos de 350 especies distintas.
El agua de los piletones es recolectada por buques en cercanías de la playa de Ipanema y es canalizada hasta el acuario donde es controlada y tratada para garantizar el bienestar de todas las especies. El 90% de dichas especies pertenecen al litoral brasileño.
Pero si duda, la principal atracción de AquaRío sea la posibilidad de dormir entre tiburones. Ya que cuenta con un enorme túnel de paredes acrílicas de 20 metros de largo y dos metros de ancho, diseñado para que los visitantes puedan recorrerlo y tener la sensación de inmersión total a 7 metros de profundidad y en medio de tiburones. Muchos colegios optan por el pernocte en el lugar como parte de una experiencia única e inolvidable.
Diariamente, AquaRio abre de 10 a 18 hs.
La entrada para el público general es de U$S 20,74. Los menores de 3 a 17 años y personas con necesidades especiales (nacionales y extranjeros), pagan U$S 10,30. Niños menores de 3 años: Entrada Libre.
Observar la Catedral Metropolitana de San Sebastián
La Catedral de San Sebastián de Río es sin duda muy atrayente porque no guarda el aspecto exterior de una iglesia, capilla o catedral. Más bien, se parece a un edificio de la modernidad. Fue un proyecto desarrollado por el arquitecto Edgar de Oliveira da Fonseca, que comenzó en 1964 y tardó 15 años en completarse, con unas dimensiones de 75 m de altura y 106 m de diámetro y una estructura cónica inspirada en las pirámides de Centroamérica.
El espacio de la catedral puede albergar a 5,000 personas sentadas. Su estructura está hecha de hormigón armado y todos tienen una organización espacial central conectada a una cruz griega en el centro. De esta cruz salen cuatro grandes y largas vidrieras que permiten la iluminación interior de la estructura.
El horario de visitas es todos los días de 7 a 17 hs horas y la entrada es libre y gratuita.
Bailar en las escuelas de samba
¿Y qué mejor que ser feliz un día de lluvia en Río de Janeiro? Para ello, la opción más acorde te la dejamos para el final: ir a visitar una escuela de samba y dejar todos los males con el repiqueteo de los pies contra el suelo. Las escuelas de samba albergan diferentes eventos la mayor parte de los fines de semana durante todo el año. Desde ensayos hasta presentaciones, sesiones de samba en vivo y almuerzos.
Aquí te dejamos las direcciones de algunas de las escuelas:
http://www.salgueiro.com.br/agenda