Decidir cuántos días quedarse en una ciudad es algo que, en realidad, depende de tus intensiones y necesidades de cada tipo de viajero. Puede que te encuentres en medio de un viaje de negocios y quieras aprovechar el tiempo libre, así como también encontrarte en medio de un itinerario que comprende diversos países y ciudades. En casos como la Ciudad de México (CDMX, antes conocida como Distrito Federal), las alternativas son varias: puedes elegir quedarte unos pocos días y sólo ver los puntos más importantes, así como prolongar tu estadía y conocerla a fondo. A continuación, te responderemos al gran interrogante sobre cuántos días debo quedarme en CDMX y qué hacer en cada uno.
Un itinerario de 4 días en CDMX
Como acabamos de mencionar, no hay una respuesta exacta de cuántos días permanecer en la Ciudad de México. Pero aquí te propondremos un calendario de 4 días en los que podrás conocer los atractivos más importantes de la ciudad y un poco más: una cantidad razonable de tiempo para quien visita CDMX por primera vez, y no quiere perderse de nada pero tampoco tiene intenciones de quedarse una larga temporada para poder combinar con otros destinos.
Día uno: empápate de historia
Durante el primer día de tu viaje, te proponemos dedicarlo a conocer la historia de México en el punto de la ciudad en el que la encontrarás más concentrada: el casco histórico. Será un día largo, por lo que te proponemos comenzar alrededor de las 9 am. Puedes iniciar tu recorrido en la Alameda Central, el parque público más antiguo de toda América Latina. Conocido por sus fuentes, monumentos y árboles frondosos, cuenta con espacios de WIFI gratuito y muchas comodidades para pasar una mañana caminando por allí. Además, en el costado sur puedes hallar un puesto de información turística para hacerte con un mapa en papel del casco histórico, el cual te será más que útil.
Una vez que recorriste la Alameda Central, puedes ir al Palacio de Bellas Artes, el más importante de su clase en todo México. Además de las galerías que ocupan el establecimiento y las exhibiciones temporales, también existe una cartelera que te ofrece actividades de todo tipo, entre las que podrás encontrar conciertos, danza, teatro y mucho más. Quienes visitaron este destino destacan los murales que están pintados sobre el mismo, varios de los cuales fueron realizados por el célebre Diego Rivera. Puedes chequear toda la información en la página oficial del museo.
Luego de tu visita al Palacio de Bellas Artes, la cual puede llevarte un poco de tiempo debido a la gran variedad de propuestas que posee, puedes encontrar al lado el Palacio Postal, un imponente edificio diseñado durante la dictadura de Porfirio Díaz con la idea de mostrar “el progreso de México”. La construcción, que data desde principios del siglo XX fue altamente influenciado por las tendencias europeas de la época. Si viste “Coco”, la celebrada película animada de Pixar, notarás las similitudes con la “Gran Terminal” que aparece en la historia. No te pierdas de ver su elevador de cristal, sus escaleras y su cúpula.
Desde allí, puedes recorrer en pocos metros dos lugares más que interesantes: la Casa de los Azulejos y la Catedral Metropolitana. En el caso del primero, este palacio es de la época colonial y, tal como indica su nombre, está cubierto de azulejos que lo convierten en único. Si cuentas con un presupuesto no muy holgado, puedes comer allí disfrutando de una muy buena vista. En el caso de la Catedral Metropolitana, al norte del Zócalo (Plaza de la Constitución), podrás ver un edificio de más de 250 años con múltiples influencias estilísticas. Además, es la catedral más grande del continente.
Por último, no hay visita al casco histórico de Ciudad CDMX que no termine con una visita al Palacio Nacional, la antigua casa de Moctezuma, Hernán Cortés y los virreyes españoles que actualmente funciona como sede del Poder Ejecutivo de México. Con unos bellos jardines ideales para tomarse un respiro, se pueden ver murales pintados por Diego Rivera tanto en el segundo piso del Palacio Nacional como en diferentes escaleras.
Día dos: una visita al sitio arqueológico de Teotihuacan
Tal y como se autodescribe el propio Estado, “la tierra mexicana es una cuna histórica desde mucho antes de la llegada de los conquistadores. La cultura mexicana lleva miles de años gestándose en este territorio”. En ese lugar, Tetohuacan es uno de los sitios más importantes a nivel arqueológico dentro de la región. A apenas 50 kilómetros de la Ciudad de México, puedes dedicarle un día entero a este sorprendente lugar, en el que hallarás ecos de la historia para comprender el futuro. Si te queda un poco de tiempo, también puedes visitar la Basílica de Guadalupe, un hermoso edificio que se encuentra cerca.
En Teotihuacán hallarás excavaciones y una serie de pirámides que cuentan con más de 2000 años de antigüedad. Ten en cuenta que estas son las únicas pirámides en el mundo que se pueden escalar, por lo que es una experiencia única. Además, podrás tomar fotos increíbles. Además, la Ciudad Prehispánica de Teotihuacán fue sin lugar a dudas uno de los centros urbanos más importantes e imponentes del mundo antiguo, llegando a concentrar a una población de más de 100.000 habitantes en su momento de mayor expansión. Desde 1987, este sitio forma parte de la lista indicativa de Patrimonio Mundial de la UNESCO, por lo que su reconocimiento es más que importante alrededor del mundo.
Para acceder a la zona arqueológica tienes diferentes alternativas: transporte público, contratar un tour que puede rondar los 35 dólares (aunque incluye visita a la Basílica de Guadalupe) o ir en Uber u otro tipo de aplicaciones por un costo de 25 dólares desde el Zócalo. Ten en cuenta que la entrada al lugar –si vas sin Tour- te costará alrededor de 4 dólares y el tiempo estipulado para una visita completa está cercano a las tres horas.
Día 3: Xochimilco y Estadio Azteca
Llegado a este tercer día, quizás notes que has caminado mucho y necesitarás tomar un día con menor intensidad y mayor disfrute, sin que ello signifique perderte de conocer nuevos destinos. Es por eso que puedes priorizar lugares donde estar cómodo y conocer las costumbres locales, como la cultura, la danza y una gastronomía que es admirada en todas partes del mundo.
Nuestro primer destino en esta jornada será Xochimilco, donde podrás encontrar el paisaje de una serie de canales donde sentarte a comer al mismo tiempo que escuchas música tradicional. También puedes alquilar una “trajinera”, es decir los tradicionales botes que navegan por la zona de Xochimilco. Además, no solo es un lugar para relajarte y disfrutar, ya que también podrás empaparte con un poco de historia azteca con el método cultivo de chinampa, el cual fue de vital importancia para el imperio Azteca.
Tómate el tiempo que consideres necesario para disfrutar de todo lo que este lugar tiene para ofrecerte y luego corona tu tarde con una visita a uno de los infaltables de CDMX: el Estadio Azteca. Ya seas amante del fútbol o no, este lugar ya forma parte de la cultura popular mundial, ya que allí tuvo lugar la inolvidable actuación de Diego Armando Maradona durante la Copa del Mundo de 1986. Por último, si puedes quedarte hasta la noche, te recomendaremos visitar la plaza Garibaldi para escuchar a los Mariachis que se concentran allí y ya sentirte parte de México.
Día 4: Tiempo libre y museos para todos los gustos
Llegamos al último día en CDMX, en donde seguiremos fieles a un consejo que repetimos en Intriper: confiar en tu intuición, preguntar a personas locales de confianza y dejarte llevar por una caminata libre para conocer un poco de lugar en mayor profundidad. Siempre teniendo en cuenta las mínimas medidas de seguridad para ahorrarte un dolor de cabeza. Por ejemplo, puedes volver a visitar esa zona que tanto te gustó, así como también recorrer librerías, tiendas de diseño y mercados locales que sabes que no encontrarás en otra parte del mundo. Caminar sin preocuparte tanto por el reloj es fundamental para disfrutar a fondo cualquier viaje. Además, si hiciste amigos en tu estadía, es una excelente oportunidad para despedirte de ellos.
En la misma dirección, si sientes que te sobra tiempo, te recomendamos elegir aunque sea uno de los museos que abundan en la CDMX y visitarlo. Dos opciones más que interesantes pueden ser el de antropología o la muy concurrida casa de Frida Kahlo. Incluso puedes intentar hacer ambos en la misma jornada. Si debes optar por uno, podemos recomendarte la casa de Frida: su casa azul nos resulta una parada imperdible, en donde el arte, la historia moderna y el amor flotan en el ambiente. Es importante reservar con cierta anticipación o al menos comprar los tickets de manera online para ahorrarte las filas. La audioguía es otro ítem más que importante, ya que te será de vital importancia para mirar correctamente y apreciar en profundidad. Por último, sacar fotos adentro tiene un pequeño costo extra.
Como habrás podido ver, las ofertas en CDMX son más que variadas y con apenas 4 días de estadía ya puedes considerarte abrumado por la variedad de alternativas. Haz tu itinerario personal teniendo en cuenta estas recomendaciones y verás cómo la Ciudad de México te cautivará desde el primer momento.