Soneva Jani es el paraíso. Sí, existe y lo puedes encontrar en la isla de Medhufaru, ubicada en el Atolón Manadhoo en Maldivas.
Y es que hasta que no lo ves con tus propio ojos, crees que esa gran cantidad de fotos que ves en tu pantalla del mar color turquesa casi sin movimiento con el fondo de arena blanca es todo mentira. Pero no, es real y tú también puedes conocerlas.
Maldivas es un verdadero edén tropical en el océano Índico, con mares turquesa, arrecifes coralinos, mares de estrellas, formado por casi 1.200 islas y 26 atolones y una exuberante vegetación repleta de cocos.
Maldivas cuenta con exactamente 1.190 islas, en su mayoría desiertas, en pleno océano Índico, al sudoeste de Sri Lanka y a 450 km de la India.
Y allí, como una joya, emerge el Soneva Jani, un lujoso resort ubicado la isla de Medhufaru, una de las más grandes de las Maldivas y a sólo 40 minutos en hidroavión del aeropuerto internacional de Malé.
Inspirado por una palabra que significa «sabiduría» en sánscrito, Soneva Jani está compuesto por 46 villas de lujo con distintas capacidades y servicios, dentro de una laguna de aguas cristalinas, bordeada de islas con playas vírgenes y cubiertas de exuberante vegetación.
En este lugar vas a disfrutar de las islas más espectaculares, arena blanca, palmeras y lagunas de transparencias turquesas que una barrera de arrecifes separa del azul intenso del océano.
Pero eso no es todo: algunas de las espectaculares villas sobre el agua del Soneva Jani incluyen toboganes para ir directamente de la cama al agua sin tener que bajar ni siquiera un escalón. ¡Una locura!
La villa más pequeña, de un dormitorio, con capacidad para dos adultos y dos niños, ocupa una extensión de 416 m2. La más grande, con seis dormitorios y capacidad para 12 adultos y 4 niños llega a los 2.250 m2.
Aparte existe otra villa privada de nueve habitaciones con una torre de observación de 11 metros de altura. Villas de Agua o Villas de la Isla, así se llaman dependiendo de su ubicación.
Todas las villas de agua en Soneva Jani vienen con tobogán de agua. Tan solo imagina tener una habitación con toboganes de dos pisos al mar cristalino en Maldivas. Algunas, además, poseen baño al aire libre con fuentes de agua, casa de árbol para los niños, baños de vapor, gimnasio y bodegas.
En el interior del hotel se pueden ver las estrellas en un observatorio sobre el agua con un sofisticado telescopio que se eleva a través del suelo de la plataforma de observación con vistas perfectas del cielo estrellado.
Experiencias únicas
Alojarse en Soneva Jani no implica estar todo el día tumbado al sol. Por el contrario, son muchas las actividades a las que se puede optar.
Los clientes pueden disfrutar de experiencias como un picnic en playa privada (por 135 dólares por persona), un safari con delfines al atardecer (por 150 dólares por persona), Cinema Paradiso, que es un cine flotante para disfrutar de una película a la luz de las estrellas (por 550 dólares para 4 personas).
También puedes visitar isla Maghoodhoo o Kudafari en lancha y conocer la vida local de las Maldivas así como las mezquitas, hospitales, escuelas, cementerios y otros lugares importantes de la cultura local. Y, por supuesto, deportes de agua, buceo, surf, masajes en la playa, paseos en catamarán o clases de cocina.
Como si fuera poco, Soneva Resort tiene una reputación nacional de ser amigable con la naturaleza, todas sus instalaciones han sido construidas de manera sostenible, con madera, bambú y paja.
Paz, tiempo y espacio, eso es el nuevo lujo. Así lo planificaron desde su creación en 1995 Eva y Sonu Shivdasani, cuando construyeron Soneva Fushi y su hogar en la isla desierta de Kunfunadhoo.
Pero lo que no imaginaban es que su visión de villa local y estilo ambientalmente responsable iba a convertirse en el primer centro turístico en las Maldivas, pionero en vacaciones de súper lujo pero orientadas al regreso a la naturaleza.
Eso sí: estas villas de lujo tienen una gran demanda. La isla goza de ocupación total o casi total durante todo el año así que reserva con antelación para alojarte en un hotel con tobogán.
Los precios arrancan en 2.000 dólares por noche, la villa de un dormitorio, impuestos aparte. La más cara, de cuatro dormitorios, cuesta 17.450 dólares por noche. También ofrecen la posibilidad de alojarte en un yate con bañera con fondo de cristal, para 6 personas, el Soneva En Aqua, por 4.200 dólares la noche.