Probablemente muchos estén de acuerdo que Nueva Zelanda sigue siendo el modelo a seguir en medio de la crisis del COVID-19. El país ya ha recibido elogios internacionales por su capacidad para contener el brote de COVID-19 dentro de sus fronteras, y ahora, la primera ministra Jacinda Ardern dice que han comprado suficientes dosis de vacunas para distribuirlas a los países vecinos de forma gratuita.
Además de asegurar ya 750,000 dosis de Pfizer y cuatro millones de Johnson & Johnson, el país agregó AstraZeneca y Novavax a la lista por 18,3 millones de dosis adicionales. Dado que la población de Nueva Zelanda es de solo 5 millones, espera tener tres veces más vacunas de las que realmente necesita.
En un comunicado de prensa, Ardern dijo:
«Ahora tenemos acuerdos con cuatro proveedores, que cubren tres tipos diferentes de tecnología de vacunas y hemos asegurado dosis más que suficientes para cubrir toda nuestra población más el Pacífico».
Según NPR, las dosis gratuitas se proporcionarán a Tokelau, las Islas Cook, Niue, Samoa, Tonga y Tuvalu. El país también está comprometiendo $ 65 millones para garantizar que los países del Pacífico tengan acceso a la vacuna y $ 10 millones adicionales para un compromiso global para ayudar a los países de bajos ingresos de todo el mundo a obtener acceso.
