¿Qué hacer en Oaxaca en 4 días? Una guía para descubrir sabores, cultura, historia y paisajes inolvidables
Oaxaca es uno de los destinos más completos y encantadores de México. Su capital, Oaxaca de Juárez, combina historia ancestral, riqueza natural, una cultura profundamente viva y una de las tradiciones culinarias más reconocidas de América Latina.
Con su arquitectura colonial, sus barrios coloridos y su vibrante escena artística, se ha ganado el título de referente internacional del turismo cultural. No por nada también se la conoce como la capital gastronómica de México.
En Oaxaca, la cocina no es solo alimento: es identidad, memoria y expresión cultural. Desde el uso ancestral del maíz hasta los múltiples tipos de mole, pasando por el mezcal artesanal y los platillos festivos, cada receta cuenta una historia que se saborea en mercados, cocinas familiares y restaurantes de autor.
La ciudad invita a recorrerla con calma. La mayoría de los atractivos del centro histórico pueden visitarse a pie. Para los sitios más alejados, como Hierve el Agua, Monte Albán o los pueblos artesanales del Valle Central, lo ideal es contratar excursiones o transporte con conductor.
¿Cuándo ir a Oaxaca?
La mejor época es entre octubre y marzo, cuando el clima es templado y seco. A fines de octubre, además, se celebra el Día de Muertos, una de las festividades más emblemáticas de México, con altares, comparsas, flores y rituales que llenan las calles de color y emoción.
Día 1: centro histórico, mercados y barrios con historia
El recorrido comienza en el corazón de la ciudad: el Centro Histórico de Oaxaca, declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Con más de 1.200 sitios históricos, sus calles empedradas y arquitectura colonial invitan a perderse con calma.
Recomendación: empieza con un tour guiado a pie. Te va a dar contexto, historia y datos clave para disfrutar aún más.
Imperdibles del día:
- Zócalo de Oaxaca: el corazón social de la ciudad, rodeado de cafés, árboles y edificios históricos.
- Templo de Santo Domingo de Guzmán: una de las iglesias barrocas más impactantes de México, con interiores cubiertos de pan de oro.
- Museo de las Culturas de Oaxaca: alberga los tesoros de Monte Albán y piezas prehispánicas de gran valor.
- Jardín Etnobotánico: un espacio verde que muestra la diversidad de flora del estado y su uso en medicina, cocina y rituales.

Para almorzar, visita el Mercado 20 de Noviembre, famoso por su Pasillo de las Carnes Asadas, o el Mercado Benito Juárez, ideal para probar dulces regionales, comprar artesanías y experimentar la vida cotidiana local.
Por la tarde, pasea por los barrios de Xochimilco y Jalatlaco:
- Xochimilco, con murales, calles empedradas y un ambiente festivo.
- Jalatlaco, uno de los más pintorescos, con casas de colores, arte urbano y bares con onda.
Día 2: naturaleza y arqueología – Hierve el Agua y Mitla
Este día es ideal para salir de la ciudad y explorar la riqueza natural y arqueológica de la región.
Primera parada: Hierve el Agua
Ubicado a unos 70 km (1h45m en auto), este sitio natural sorprende con sus cascadas petrificadas, formadas por el escurrimiento de aguas minerales. También hay pozas naturales donde puedes nadar y miradores con vistas imponentes.
Dato interesante: los zapotecas crearon aquí un sistema de irrigación tallado en piedra ¡hace más de 2.500 años!

Segunda parada: Zona arqueológica de Mitla
A 40 km de la ciudad, Mitla fue un importante centro ceremonial zapoteca y mixteca. Lo más destacado: sus intrincados mosaicos geométricos en piedra y su historia ligada al mundo espiritual y funerario.
Antes de volver a la ciudad: haz una parada en la Casa de las Artesanías de Oaxaca, donde vas a encontrar textiles, cerámicas, alebrijes y más. Un buen lugar para comprar algo auténtico y apoyar el arte local.

Día 3: Monte Albán y una experiencia gastronómica
Arranca temprano hacia Monte Albán, uno de los sitios arqueológicos más importantes de Mesoamérica.
A solo 10 km de la ciudad (30 min en auto), esta antigua capital zapoteca fue habitada por más de 1.000 años.
¿Qué ver en Monte Albán?
- La gran Plaza Central
- Las plataformas norte y sur
- El Juego de Pelota
- El Edificio J (posiblemente usado como observatorio astronómico)
Monte Albán fue declarado Patrimonio de la Humanidad en 1987 y ofrece vistas espectaculares del Valle de Oaxaca.
Por la tarde: súmate a un tour gastronómico guiado. Vas a probar tlayudas, chapulines, moles, tamales, mezcal y más. Algunos tours también incluyen clases de cocina, visitas a mercados y talleres. Es una forma perfecta de conectar sabores con historias y tradiciones vivas.

Día 4: pueblos artesanos – cultura viva
Termina tu viaje con una experiencia auténtica: visitando los pueblos artesanos del Valle Central.
Teotitlán del Valle (30 km – 45 min)
Famoso por sus tapetes de lana tejidos a mano con tintes naturales. Puedes visitar talleres donde los artesanos muestran todo el proceso: desde el hilado hasta el telar.

Santa María Atzompa (15 km – 30 min)
Conocido por su cerámica vidriada en verde, hoy reconvertida en piezas libres de plomo y con enfoque sustentable. Algunos talleres ofrecen experiencias de modelado o pintura.
Tip: haz esta excursión por la mañana (de 9:00 a 14:00) y regresa a Oaxaca para una última caminata, una galería de arte o una bebida en una terraza con vista. El final perfecto para cerrar el viaje.
En 4 días vas a descubrir lo esencial… y entender por qué quien visita Oaxaca, siempre quiere volver.