Todos saben que las millas son una buena forma para viajar “gratis”, pero pocos conocen que hay muchas formas de juntarlas más allá de volando. En este camino, las tarjetas de crédito son nuestro principal aliado: cuanto más dinero gastás, más millas sumás y así menos pagás por los pasajes.
Cuáles son los programas más usados
Hoy en día en Argentina casi todos los bancos ofrecen adhesiones a programas de pasajero frecuente, los cuales están asociados a una aerolínea. Por ejemplo el BBVA Francés tiene el programa LATAM Pass de Latam Airlines; el Santander Río, el AAdvantage de American Airlines; y los bancos Credicoop, Hipotecario, Macro, Nación y Provincia, y las tarjetas no bancarias de American Express, el programa AR Plus de Aerolíneas Argentinas.
Cómo juntar millas
La manera más convencional es viajando. Para eso, lo primero que hay que hacer para empezar a sumar millas es inscribirse en el programa de viajero frecuente de la aerolínea en la que vamos a volar, lo cual es gratuito.
Cada vez que volamos acumulamos millas, (si la tarifa lo permite y si el pasaje no es canjeado, claro). Por eso siempre al momento de comprar un pasaje es importante ingresar el número de pasajero frecuente, o hacerlo luego desde el sitio de la aerolínea al hacer el web check in o en el aeropuerto.
Vale aclarar que las millas se pueden canjear por un pasaje de avión para volar en la misma aerolínea del programa o en otra de las líneas aéreas integrantes de la alianza. Como Aerolíneas es miembro de SkyTeam, las millas también sirven en las otras aerolíneas que integran esta alianza (KLM, Delta, Air France, Aeroméxico, Air Europa y otras). En el caso de Latam Airlines, que integra Oneworld, sirven por ejemplo para British Airways, American Airlines, Iberia y Qatar Airways.
Más allá de esto, hay muchas maneras que acumular millas que no sean volando, a través de gastos cotidianos como cargar nafta, comprar ropa o salir a comer a algún restaurante. La clave para maximizarlas está en concentrarse en un sólo programa de viajero frecuente y volcar todos los gastos posibles en una tarjeta de crédito asociada a ese programa, lo cual sí tiene un costo anual que depende de cada banco.
En general, cada dólar gastado equivale a una milla.
El programa de pasajeros frecuentes Aerolíneas Plus cuenta con muchas opciones para acumular millas, que van desde compras en shoppings del grupo IRSA y cadenas comerciales como Garbarino, Coto y Compumundo, hasta la contratación de servicios para un viaje mediante plataformas como Booking, Rental Cars y Assit Card.
Por su parte, el programa LATAM Pass también ofrece la posibilidad de sumar millas mediante determinados hoteles (por ejemplo al reservar a través de Booking o Rocketmiles o al hospedarse en algún InterContinental, entre muchos otros), al hacer una compra en algún comercio asociado (como Shell, Netshoes y Zurich) y al usar la tarjeta BBVA Francés.
Por último, y no menor, a veces las aerolíneas sacan promociones para comprar millas a buen precio, lo que se convierte en una buena oportunidad para conseguir millas a bajo costo.
El aeropuerto de El Palomar será internacional: a dónde se podrá viajar y con qué aerolíneas
Cómo aprovecharlas
Pero no todo es cuestión de acumularlas. La segunda parte, que incluye un poco más de trabajo e investigación por parte del viajero, es saber aprovecharlas y esperar el momento justo para usarlas.
Santiago Torres, más conocido como Sir Chandler, comentó a Intriper que el mejor uso que se le puede dar a las millas es “ver el destino principal de la aerolínea y no el raro”, es decir, apuntar a los destinos clásicos y canjear con 10 meses de anticipación.
“Muchas veces la gente comete el grave error de querer usar las millas de Latam o de Aerolíneas Argentinas con las empresas aliadas. Uno tiene que buscar el canje de millas siempre para el principal destino de esa aerolínea. Si yo quiero ir a París, con Aerolíneas Argentinas voy a hacer el mejor canje de millas a Madrid o a Roma y de ahí me conviene comprar otro pasaje. Con Latam pasa lo mismo, conviene ir a Nueva York o Miami, pero no a Los Ángeles, San Francisco o Denver”, graficó Chandler.
Estar atento a las promociones es otra de las claves, ya que las aerolíneas muchas veces ofrecen jugosos canjes de millas. “El mejor canje es Miami y Nueva York, pero Aerolíneas por ejemplo sacó canje a Europa a 35.000 cuando siempre salieron 80.000. Ahora está 50.000 por un tiempo limitado, que igual es un buen canje”, agregó el bloguero.
Aerolíneas Argentinas sacó en septiembre la oportunidad para canjear millas con hasta un 80% de descuento en vuelos nacionales; y mejor aún, en octubre sacó canjes a Europa por 35.000 millas ida y vuelta en vuelos directos. En tanto, Latam ofreció el último mes hasta 50% de descuento en canjes locales e internacionales.
Si bien aclaró que esto cambió un poco con las últimas promociones, Chandler señaló que “el mejor canje de millas siempre es Estados Unidos, no Europa”.
“Europa siempre cuesta el doble de millas que EE.UU., siendo que el pasaje no cuesta el doble sino como mucho un 10 o 15 por ciento más. Salvo que tengas las millas y quieras canjear para Europa, te conviene guardarlas para Estados Unidos o Cancún”, justificó.
Asimismo, destacó que hace dos años no convenía canjear nacional y ahora sí. Otra cosa que tampoco conviene es utilizar las millas para volar a Santiago de Chile, ya que se paga lo mismo de tasas saliendo de Buenos Aires a Santiago que a Sidney.
“El costo/beneficio no sirve en este caso. Si puede servir para Lima, Río de Janeiro o San Pablo”, añadió. Por último, Chandler también desaconsejó transferir millas: “Es absurdo, porque estoy pagando por algo que ya es mio. Transferir 20.000 millas me cuesta por ejemplo u$s 500 y comprarlas u$s 800. Prefiero mantenerlas para que cuando vuele, sume y renueve, a gastarlas de esa manera”,
concluyó.