En un intento por prevenir la propagación del nuevo coronavirus, autoridades de una localidad de España han llevado a cabo una iniciativa un tanto polémica.
Se trata de una medida tomada por la localidad española Zahara de los Atunes con el propósito de prevenir la presencia del coronavirus en el lugar. Sin embargo, desafortunadamente en el intento por resolver un aspecto crítico en estos momentos, podrían generar un problema mayor a futuro.
El producto utilizado para la desinfección es a base de agua mezclada con lavandina (comúnmente llamado ‘lejía’) y ha despertado polémica considerando el gran desequilibrio que podría ocasionar en los ecosistemas presentes en la zona, siendo altamente perjudicial para la flora y fauna del lugar.
La noticia ocasionó que activistas y organizaciones ambientalistas pusieran el grito en el cielo y las críticas y el repudio en redes sociales no tardaron en aparecer.
Por su parte, la división de Greenpeace en España anunció: «Fumigar con lejía playas en plena época de cría de aves o de desarrollo de la red de invertebrados que sustentarán la pesca costera y destrozar el valor turístico del litoral, no es una de las ideas de Trump. Está ocurriendo en Zahara de los Atunes«.
Fumigar con lejía playas en plena época de cría de aves o de desarrollo de la red de invertebrados que sustentarán la pesca costera y destrozar el valor turístico del litoral, no es una de las ideas de Trump. Está ocurriendo en Zahara de los Atunes ????https://t.co/afCFLg1sVG
— Greenpeace España (@greenpeace_esp) April 27, 2020
Ante la polémica generada, el presidente de la entidad local autónoma Agustín Conejo, explicó que la decisión de desinfección tenía como objetivo proteger a los niños que pudieran pasear junto al mar. Cabe recordar que, desde el pasado domingo, los menores de 14 años que viven en España pueden salir de sus casas durante una hora diaria. No obstante, y luego de apreciar las críticas recibidas por el acto de negligencia, confesó que la medida fue equivocada.
Dinamarca adopta los cuatro últimos elefantes de circo del país para que puedan disfrutar su retiro en paz
En un intento por proteger a los animales y prohibir el uso de los mismos con fines lucrativos y de entretenimiento, son cada vez más los países que deciden tomar cartas en el asunto e imponer medidas para su preservación.
Dinamarca es uno de esos países que parecen dar el ejemplo en cuanto a profesar el bienestar de los animales y resguardarlos: el gobierno nacional pagó aproximadamente 11 millones de coronas danesas (algo así como US$ 1.6 millones) en adoptar los cuatro últimos elefantes de circo que existían en el país.
Ahora, los animales beneficiados podrán disfrutar de su retiro en paz, lejos de la carpa y las imposiciones del ser humano. Continuar leyendo…
