Una nueva regulación de protección promulgada en Sri Lanka establece que queda prohibido beber y montar elefantes en el país, junto a otras medidas para proteger a los animales.
Esta nueva medida fue lanzada el pasado jueves, 19 de Agosto de 2021, por el ministro de protección de la vida silvestre, Wimalaweera Dissanayake. La publicación de este documento oficial establece que mientras se encuentren trabajando con los elefantes, quienes los manejen tendrán prohibido beber y consumir drogas.
En esta nueva normativa también se establece que los elefantes bebés que tengan menos de dos años deberán permanecer con sus madres y, por lo tanto, se prohíbe que se los utilice para trabajar. Allí también se plantea que cualquier persona que «posea o tenga custodia de estos elefantes», tiene la responsabilidad de «asegurarse que quien lo monte no esté consumiendo ningún tipo de bebida blanca ni drogas dañinas mientras está trabajando».
Según informa el sitio de noticias CNA, en Sri Lanka no es raro que los elefantes sean conservados como un símbolo de riqueza de algunas familias. Sin embargo, han aumentado los reportes de maltrato y crueldad frente a estos animales y esta serie de medidas pretende cuidarlos frente a estas situaciones.
A partir de ahora, todos los elefantes domésticos tendrán que contar con una tarjeta biométrica de identidad, en la cual se incluirán los detalles de ADN y una fotografía del animal. Además, los propietarios o quienes tengan custodia tendrán que asegurarse que los elefantes que sean utilizados para cargar pesos pesados no trabajen de noche ni tampoco más de cuatro horas por día.
Otra de las medidas publicadas plantea que cada uno de estos mamíferos tiene derecho a dos horas y medias de baño, para que puedan relajarse y descansar en el lodo, y también tendrán que tener una visita veterinaria al menos dos veces al año.
De acuerdo a los registros oficiales, según informó CNA, Sri Lanka cuenta con unos 200 elefantes domésticos y la captura de aquellos que viven en la naturaleza está prohibida, de hecho tiene la pena de muerte. Sin embargo, los activistas de animales sostienen que en los últimos años se han robado al menos 40 bebes elefantes de parques nacionales.
Actualmente Sri Lanka cuenta con unos 7.500 elefantes que viven en la naturaleza, de forma libre.
