A partir del pasado domingo 9 de febrero, quedó establecido un referéndum para incluir sanciones ante cualquier expresión de discriminación basada en la orientación sexual. Es decir, con la incorporación en el Código Penal, la homofobia será considerada como un delito.
Según informó la agencia de noticias EFE, con el 63,1 % de los votos, se aprobó que la legislación de Suiza sancione la homofobia tal como ya lo hace con los casos de discriminación por razones religiosas, raciales o contra grupos étnicos, que se encuentran explícitamente prohibidas.
En efecto, se modificará el Artículo 261 bis del Código Penal, que tipifica el racismo, para que también se incluya el castigo ante los actos homofóbicos. El Gobierno y el Parlamento respaldaron esta propuesta para reforzar la protección contra la homofobia, ya que «la dignidad humana es un valor fundamental en la sociedad suiza y el comportamiento discriminatorio viola los principios garantizados por la Constitución Federal«.
Así, a partir de ahora, se prohibirán los actos o declaraciones públicas que atenten contra la dignidad humana de una persona o un grupo de personas en relación con su orientación sexual, considerando que esto puede ocasionar un clima de odio y poniendo en peligro la coexistencia pacífica en la sociedad.
Además, una de las nuevas medidas que serán tomadas a partir de esto, incluyen que tanto hoteles como restaurantes, cines y compañías de transporte serán penalizados con multas de hasta tres años de prisión al responsable, en caso de rechazar o discriminar a cualquier ciudadano única y exclusivamente por su orientación sexual.
Aún a pesar de esta nueva reglamentación, cabe destacar que la sociedad suiza continúa prohibiendo medidas tales como el matrimonio entre ciudadanos del mismo sexo y la adopción conjunta.
Finlandia acaba de igualar la licencia de maternidad: 7 meses para cada padre
El gobierno finlandés, liderado por la primera ministra de 34 años, Sanna Marín, acaba de anunciar una política de vacaciones remuneradas igualadas tanto para las madres como para los padres de los recién nacidos.
A las nuevas madres y padres se les otorgarán siete meses de licencia de maternidad y paternidad respectivamente, por un total de 14 meses de licencia remunerada. Una madre embarazada también recibirá un mes de subsidio de embarazo antes de que nazca el niño.
La política está diseñada para eliminar los prejuicios de género cuando se trata de vacaciones pagadas para nuevos padres.
Anteriormente, se concedían cuatro meses de licencia remunerada a las madres, mientras que los padres solo tenían dos meses. Los padres también podrán transferir 69 días de su propio permiso a su pareja, para mayor flexibilidad, y los padres solteros podrán usar los 14 meses para ellos mismos. Continuar leyendo…
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