Lo que comenzó como una tranquila caminata entre montañas heladas en Suiza terminó con una caída de ocho metros… y un rescate digno de película gracias a un inesperado héroe: un perro chihuahua.
El incidente ocurrió en el glaciar de Fee, cerca de la comuna suiza de Saas-Fee. Un hombre se encontraba de excursión con su pequeño perro cuando, de forma repentina, cayó en una grieta profunda del glaciar. El chihuahua, que no cayó junto a él, se quedó firme en el borde del agujero esperando ayuda.
El dueño logró pedir auxilio usando un walkie-talkie de aficionado, cuya señal fue captada por una persona que dio aviso a los servicios de emergencia. Rápidamente, un helicóptero de rescate de la compañía Air Zermatt partió con tres socorristas hacia el lugar. Sin embargo, al llegar, se encontraron con una gran dificultad: el glaciar era extenso y el punto exacto de la caída era prácticamente imposible de localizar.
Fue entonces cuando el perro volvió a entrar en escena. Uno de los rescatistas logró avistarlo, y gracias a sus movimientos insistentes, el equipo determinó la ubicación exacta de la grieta. «Gracias al comportamiento del perro, el equipo pudo localizar al accidentado y descender hasta él mediante rápel», informó Air Zermatt.
El hombre fue rescatado con éxito y trasladado junto a su fiel compañero al hospital de Visp, en el suroeste de Suiza. Según los rescatistas, la lealtad y paciencia del pequeño chihuahua probablemente le salvaron la vida a su dueño.
Una historia que demuestra que el tamaño no importa cuando se trata de valentía.
