Viajar a una de las playas más famosas de Brasil dejará de ser completamente gratuito a partir del 1° de enero de 2026. Las autoridades locales anunciaron que comenzarán a cobrar una tasa ambiental diaria a todos los vehículos turísticos, con el objetivo de reducir el impacto ecológico y controlar el ingreso masivo de visitantes.
El cobro, que ya generó debate entre empresarios y turistas, será automático, sin peajes ni controles presenciales, gracias a un sistema de lectura digital de patentes. Los valores van desde R$ 3 hasta R$ 90 por día, dependiendo del tipo de vehículo y del tiempo de permanencia.
Por ejemplo, las motocicletas pagarán R$ 3 diarios, los autos particulares R$ 9,90, las vans R$ 30 y los autobuses R$ 70. En el caso de camiones o vehículos de gran porte, la tasa llegará a R$ 90 por día.
La medida comenzará a aplicarse en Porto Seguro, al sur del estado de Bahía, y también abarcará a los populares destinos de Arraial d’Ajuda, Trancoso y Caraíva. Según las autoridades, los fondos recaudados se destinarán a mejorar la infraestructura, impulsar la movilidad sustentable y financiar proyectos ambientales.
Durante octubre se realiza una etapa de prueba sin cobro real, para que los visitantes y operadores turísticos se familiaricen con el nuevo sistema. Los residentes locales, el transporte urbano y los vehículos que permanezcan menos de ocho horas estarán exentos del pago.

Porto Seguro recibe más de dos millones de turistas por año y se suma así a otros destinos brasileños que ya aplican medidas similares, como Fernando de Noronha, Bombinhas, Ubatuba e Ilha Grande.
Aunque algunos temen que la tasa pueda ahuyentar turistas, el municipio insiste: “No se trata de recaudar dinero, sino de proteger el paraíso que todos vienen a disfrutar”.
