Segú las imágenes difundidas en las redes sociales, el rey Carlos III y su esposa la reina Camila, fueron agredidos por un manifestate quien les arrojó cuatro huevos cuando llegaban a una ceremonia tradicional en York. El incidente pasó desapercibido por los monarcas quienes siguieron con el compromiso sin el menor exabrupto.
La pareja se encontraba en York para asistir a la inauguración de una estatua de la reina Isabel II, la primera que se instala desde su muerte, como parte de una breve gira por Yorkshire. En cuanto al manifestante, fue tirado al suelo por cuatro policías mientras gritaba “este país se construyó sobre la sangre de los esclavos”.
Según el medio británico, Daily Mail, el incidente se produjo justo un día después de que la ahijada de Carlos III, Fiona Compton, revelara que ella y el Rey estuvieron hablando sobre la necesidad de “apertura” al discutir el papel histórico de Gran Bretaña en la trata de esclavos.