Meses después de la erupción de un volcán subterráneo el 12 de agosto de 2021, han aparecido enormes cantidades de piedra pómez alrededor de las costas más al sur de Japón.
El volcán submarino activo Fukutoku-okanoba se encuentra a unos 25 metros bajo la superficie del Océano Pacífico y 1000 kilómetros al sur de Tokio. Uno de los satélites de la NASA capturó una imagen de la enorme columna de gas y vapor inusualmente grande que se extendía 18 kilómetros en el aire. Se cancelaron varios vuelos de Philippines Airlines para evitar que las cenizas dañen los motores a reacción de los aviones. Fue una hazaña impresionante de la naturaleza y un poco disruptiva.
Pero la historia de Fukutoku-okanoba no se detiene ahí.
El 17 de agosto, otra imagen de satélite mostró grandes balsas de piedra pómez flotando alrededor de la caldera del volcán. Y siguieron flotando hasta que, a finales de octubre, aparecieron en las costas de Japón.
Según el Programa Global de Vulcanismo, la piedra pómez llegó primero a la isla de Kitadaito el 8 de octubre y luego se dirigió a la prefectura de Okinawa, así como a varios puertos de la prefectura de Kagoshima en la parte sur de la isla de Kyushu.
La piedra pómez es una roca muy porosa que se forma durante erupciones volcánicas explosivas. La piedra pómez flota en el agua y, según el Observatorio de la Tierra de la NASA, «Las balsas de roca pueden flotar en el océano durante meses o incluso años».
Las toneladas de piedra pómez flotante de Fukutoku-okanoba han causado estragos en todas partes. Ha obstruido puertos y playas, ha matado a la fauna marina, ha dañado barcos y motores y ha perturbado gravemente la industria pesquera, informa The Guardian.
Las fotos tomadas por Síle Nic Chormaic, una física irlandesa que vive en Japón, muestran el alcance de la invasión de piedra pómez.
Chormaic también capturó un video de ella pasando su mano a través de la capa increíblemente gruesa de piedra pómez en el agua.
Las autoridades locales han comenzado a limpiar las decenas de toneladas de piedra pómez con excavadoras. Se espera que la operación de limpieza lleve semanas.
