Escocia es simplemente un país increíble, ya que cuenta con una extraordinaria variedad de paisajes. Desde montañas y lagos a unas playas que no te imaginabas podrían estar acá.
Por eso te dejamos esta lista, para que apuntes cuales son las paradas obligadas en tu próximo recorrido por más septentrionales del Reino Unido.
1. Castillo de Edimburgo
La atracción más importante y concurrida de la capital de Escocia es el imponente Castillo de Edimburgo. Su construcción comenzó allá por el siglo XII y lo más loco de todo es que lo hicieron sobre el núcleo de un volcán (extinto, no te asustes).
Con solo llegar y verlo ya te vas a quedar con la boca abierta, ya que es más grande de lo que te imaginas o de lo que parece en las fotos. Recorrerlo por completo puede llevarte más de un día, ya que en el interior hay varios museos y exposiciones. Una de las cosas más lindas que tiene es su vista panorámica de la ciudad que puede apreciarse desde lo alto del castillo.
2. Eilean Donan
Otro de los lugares más emblemáticos de toda Escocia. Una fortaleza construida en una isla rodeada por tres ríos, montañas y bosques, hacen que este sea un paisaje de película.
Si lo visitas durante la mañana vas a poder apreciar una postal típica: cielo gris, neblina sobre el lago y una llovizna que adornan al castillo. Si llegas ya por la tardecita la imagen va a ser aún más hermosa y cautivante con la fortaleza iluminada.
3. Ben Nevis
Ben Nevis es la montaña más alta de todo el Reino Unido. Mide 1.344m y dependiendo de la temporada en la que la visites.
En verano el camino desde el mar a la cima es no presenta una dificultad para nada (una ruta dominguera). En cambio en invierno, con el mal tiempo, el hielo y la nieve, se convierte en una montaña muy distinta representando uno de los mayores retos de Gran Bretaña.
4. Lago Ness
Quizás este sea el lago más famoso del mundo. Es que con la leyenda de su monstruo marino Nessie se convirtió en una fuente de intriga y misticismo.
Se encuentra situado en el centro de las Higlands de Escocia y se extiende a lo largo de 37 kilómetros. Año tras año miles de turistas visitan el lago en busca de, no solo el monstruo, sino del paisaje hermoso y la cultura de estas tierras.
5. Luskentyre Beach
En un rincón de las Islas Hébridas (en la costa oeste) se encuentra esta playa que seguramente no imaginabas existan en Escocia. Una de las mejores en todo el Reino Unido, la playa Luskentyre no tiene nada que envidiarle al Caribe o al Mediterráneo.
Tiene una costa extensa de arenas doradas y aguas limpias (aunque un poquito frescas) de color turquesa, con un ambiente decorado con los acantilados escoceses. Realmente imperdible.
6. Castillo de Stirling
A solo 70 kilómetros de Edimburgo se encuentra este pueblito medieval que alberga a uno de los castillos más importantes de la historia escocesa. Una fortaleza compuesta de edificios que son el mejor exponente de la arquitectura renacentista en Escocia y se remontan a los siglos XVI y XVII.
7. Skara Brae
Este es uno de los complejos arqueológicos mejores preservados de la era Neolítica y data de entre el 3200 y 2500 a.C.
Son unas casas de piedras unidas por pasillas que fueron descubiertas gracias a un enorme temporal que hubo en 1850 y despejo las dunas de arena que cubrían este asentamiento. Estas casas sorprendieron por el nivel de sofisticación que tienen: poseen cerradura, un sistema de desagüe y también un sistema de tuberías elemental con aberturas en las paredes para evacuar los deshechos.
8. Cuillin Hills
Cuillin Hills es una cadena montañosa ubicada en la isla de Skye, que destaca por sus hermosos paisajes y su majestuosidad.
Un sitio ideal para practicar todo tipo de actividades: escaladas, caminatas, paseos en caballo, o simplemente sentarse a comer algo y disfrutar de la siempre impresionante naturaleza.
9. Abadia de Melrose
Otro imperdible al sur de Edimburgo. Las ruinas de esta abadia, construida en 1136, guardan siglos de historia, guerras y saqueos y son el claro reflejo de lo que hoy puede apreciarse.
A pesar de tener cientos de años, sus ruinas dejan ver con claridad su estilo gótico, sus esculturas y símbolos y lo más emocionante es que el corazón de Robert the Bruce, rey héroe de Escocia, está enterrado allí.
10. Broch de Mousa
Un broch es una torre prehistórica que hacía las veces de casa. El de Mousa es el ejemplar mejor conservado de toda Europa.
Se cree que fue construido en el año 100 a.C, tiene 13 metros de alto y todavía puede visitarse por dentro.