La India es un lugar al que todos deberíamos ir una vez en la vida, una experiencia única y maravillosa por varias razones…
1- Vas a conocer una cultura realmente diferente a la que estás acostumbrado.
Una cultura completamente diferente, que ni bien empieces a caminar lo vas a notar y no vas a poder parar de mirar a tu alrededor. Imaginate que hasta la forma de mover la cabeza para decir «no» es distinta, ellos la mueven en el sentido de lo que nosotros conocemos como «si».
Partiendo de eso, vas a toparte con costumbres muy curiosas para nosotros, como algunas de las que te contamos…
– La vaca es un animal sagrado y está prohibido sacrificarlas.
– El río Ganges también es considerado sagrado y es por eso que en la ciudad de Varanasi, vas a ver como los hindúes queman a sus fallecidos a orillas de él y después tiran lo que quede del cuerpo y sus cenizas al río. Así como también darse un baño en él se considera purificador de pecados.
– La mayoría de los indios son vegetarianos (por supuesto no comen vaca) y una minoría come carne de búfalo, puerco o pollo.
– La mayoría de los casamientos son arreglados por las familias de los novios, entre personas de la misma casta, y de similar nivel social y económico.
– Las ratas son consideradas como «reencarnaciones», y se dice que tendrás suerte (o mala suerte para los que les tenemos fobia) si ves a una blanca o te pasa por encima del pie.
Y obvio la lista es interminable, seguramente hay que vivirlo para poder conocer un poco más y ver cómo impacta en cada uno, muchos dicen que terminas amando el país u odiándolo.
2- Es el centro espiritual del mundo.
Si querés renovar tus energías, hacer una búsqueda espiritual profunda, la India es el lugar perfecto. Con innumerable cantidad de santones, gurús, maestros y guías espirituales, es por lejos uno de los países más religiosos del mundo.
Al recorrer sus ciudades, no sólo vas a encontrar muchos templos y lugares sagrados, sino que además la religión está presente en cada instante. Por ejemplo, al levantarse cada día, al preparar los alimentos o en ciertas horas del día dedicadas exclusivamente a la oración.
3- Vas a admirar una arquitectura fantástica y particular, con mucha historia detrás de sus mezquitas, sus templos, sus santuarios religiosos.
El Taj Mahal es su más imponente atracción, pero no es sólo la única. Entre los diferentes tipos de arquitectura típicas de la India que vas a poder admirar existen templos subterráneos, estupas, pagodas…
La diversidad de religiones (hinduismo, budismo, islamismo) ejerce sobre la arquitectura una influencia increíble con sus detalles y significados. Entre los lugares para visitar se destacan:
1- Gruta de Bhaja, Bombay
2- Grutas de Ajanta, en el Dekán
3- Templo hindú, Chittorgarh
4- Gruta de Ajanta
5- Kailasa de Ellora
4- Vas a disfrutar uno de los mejores paisajes del mundo desde la cordillera del Himalaya.
Ver el atardecer en cualquier parte del mundo es fantástico, pero contemplarlo en el Himalaya es una imagen difícil de borrar. La combinación de sol, nubes y montañas hacen que el atardecer se convierta en un espectáculo maravilloso y único en el mundo.
5- India es un país de muchas razas, muchas castas, muchos idiomas y es la tierra de muchas religiones.
Algo no muy grato, pero real de la India, es lo chocante que resulta la diferencia de clases sociales. Convive la mayor riqueza con la pobreza en cada lugar. Por ejemplo, en su palacio más visitado, el Taj Mahal vas a notar que a pocos metros de distancia lo rodean zonas y casas muy precarias.
En cuando a religión, es un país único en materia religiosa. Es el país con mayor cantidad de hinduistas, yainas, sijes, zoroastrianos y bahais, y el tercer país con mayor cantidad de musulmanes. Además, es la tierra santa del hinduismo, el budismo, el yanismo y el sijismo.
El idioma que manejan los nativos es el hindi, aunque también muchos hablan inglés, siendo los dos los idiomas oficiales del país asiático.
Un viaje a la India, un lugar tan rico en espíritu, en cultura, en religiones y paisajes. Un país tan lejano a lo que estamos acostumbrados, pero sin dudas una experiencia que vale mucho la pena…
