Se trata del hotel en Moscú perteneciente a la cadena Ritz-Carlton, un lujoso complejo que ha diseñado una propuesta que permite disfrutar de la noche de Navidad con vistas únicas con el Kremlin y la Plaza Roja y siguiendo cuidadosamente cada uno de los detalles de salud e higiene para prevenir el contagio de coronavirus.
¿Cómo? A través de burbujas o cápsulas transparentes, donde se ofrecerán comidas privadas de Navidad.
El hotel Ritz-Carlton ha apostado notablemente a la calidad gastronómica: el restaurante O2 Lounge está situado en la azotea del hotel, tiene una gran terraza y sirve pescado/marisco, caviar, cócteles innovadores galardonados y una selectiva carta de vinos. El bar restaurante Novikov prepara platos de cocina panasiática, mientras que el bar salón The Ritz-Carlton ofrece té por la tarde con un toque ruso característico.
Ubicado junto a la Plaza Roja y el Kremlin, The Ritz-Carlton se encuentra en el centro financiero de Moscú, a 3 minutos a pie de los grandes almacenes GUM y del Teatro Bolshói.
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