Probablemente esto es lo más tierno que verás hoy, y esta semana, así que relájate y disfruta leer y aprender sobre los cocodrilos. Y compártelo para alegrar por un ratito a tus amigos»
Los reyes de los reptiles ya habitaban la Tierra cuando los dinosaurios todavía caminaban por sus senderos y son la viva imagen del poderío de los depredadores acuáticos. Sin embargo, de vez en cuando podemos cambiar un poco nuestra visión sobre ellos y dar paso a la ternura mientras observamos cómo un orgulloso padre cocodrilo decide dar un paseo con sus más de 100 hijos, ¡sobre su espalda!
Dhritiman Mukherjee es un fotógrafo hindú que ha pasado los últimos 20 años explorando la naturaleza. Con su cámara en mano se ha internado en las reservas naturales más emblemáticas de su país para lograr mostrar a su público la naturaleza en su estado más genuino. La mayoría de sus días se las vive internado en los tesoros de la Madre Tierra, con 280 días al año persiguiendo escenas para capturar a través de su cámara.
No es casualidad que haya conseguido una de las mejores tomas que existen en el mundo de la fotografía, de un cocodrilo que al parecer decidió tomarse muy en serio su responsabilidad y salió de paseo con su centenar de pequeños hijos. La imagen cobra todavía más relevancia pues se trata de un gavial, una especie de cocodrilo que de hecho es una de las más grandes que existen y que actualmente se encuentra en peligro de extinción.
Instinto paternal muy peculiar
La fotografía de Mukherjee muestra a un gavial macho nadando por las aguas del Santuario Nacional Chambal de la India. Y aunque su belleza es encantadora, lo realmente sorprendente yace en su espalda. Un centenar de sus pequeñas crías se apilan sobre su enorme cuerpo, una escena que despierta gran ternura. Según el fotógrafo, el orgulloso padre al parecer se apareó con siete u ocho hembras y se puede ver que está bastante involucrado en su tarea de progenitor.
Normalmente los cocodrilos hacen este tipo de cosas, sacan a pasear a sus pequeños hijos. Sin embargo, lo hacen de manera distinta de lo que se observa en la imagen. Usualmente cargan a sus crías en su hocico, así transportan a los pequeños a través de las aguas. Pero el gavial tiene una estructura fisionómica un poco distinta, su hocico es muy angosto por lo que no podría usarlo con estos fines. En cambio, deja que sus pequeños hijos se apilen en su espalda y cabeza para poder mantenerlos seguros.