Un insólito hecho sorprendió a Disney Springs, en Orlando, cuando un hombre disfrazado con equipo de buceo irrumpió en el restaurante Paddlefish, robó una fuerte suma de dinero y escapó nadando por el lago artificial del complejo.
Según el reporte del incidente, el asalto ocurrió en la madrugada del 15 de septiembre. El sospechoso, vestido completamente de negro y con gafas similares a las de un buzo, ingresó a la oficina del gerente y ordenó a los empleados que se arrodillaran y cerraran los ojos. Apenas dos minutos después, huyó con el botín, calculado entre 10.000 y 20.000 dólares.
La Oficina del Sheriff del Condado de Orange informó que el hombre no estaba armado, aunque en las cámaras de seguridad se lo ve sosteniendo un objeto no identificado hacia el lente. Todo apunta a que el ladrón utilizó el mismo acceso por el que entró: las aguas del Lake Buena Vista, donde está anclado el restaurante con forma de barco de vapor.
Pese al susto, los trabajadores resultaron ilesos y pudieron reabrir el local unas 12 horas más tarde para recibir a los visitantes. Paddlefish, especializado en mariscos y con capacidad para 760 comensales, funciona desde 2017 en el lugar que antes ocupaba Fulton’s Crab House.
El caso genera especial atención porque llega apenas semanas después de que Disney Springs anunciara un refuerzo en sus protocolos de seguridad, con controles más estrictos a los visitantes, como detectores de metales y revisión de equipaje.
Ahora, la policía investiga al misterioso ladrón acuático que protagonizó un robo digno de una escena de película en pleno corazón de Disney.
