Cuando leemos noticias como estas, nos damos cuenta que los animales nunca van a dejar de sorprendernos ni de conmovernos. Seguirán dándonos lecciones acerca de la vida y demostrándonos que, en muchas ocasiones, son mucho más humanos que nosotros.
Kerry McKinnon vive en Australia y un fría mañana de invierno recibió una sorpresa por parte de su perrita Golden Retriever, Asha.
«Era muy temprano, y mi esposo me gritó para que fuera a ver algo. Al principio no sabía de qué estaba hablando, pero luego vi a un pequeño koala acurrucado sobre Asha».
Asha encontró al pequeño koala abandonado, muerto de frío, y no dudó en dejar que se acurrucara en su pelaje, para entrar en calor. La cría se refugió en la perrita buscando el calor que había perdido al separarse accidentalmente de su mamá.
«Asha definitivamente salvó la vida del koala manteniéndolo caliente. Habría muerto ahí afuera si hubiera estado solo toda la noche. Lo pobre podría haber sido tomado por un zorro o algo así», dijo su dueña
Kerry dijo que «no fue fácil» tratar de separar a los dos, con el koala haciendo un «gran alboroto» cuando intentó quitarlo de la espalda de Asha. También agregó que al pequeño koala le está yendo bien después de ser revisado por un veterinario, y ahora un cuidador de koala local lo está cuidando hasta que puede ser liberado de nuevo en su hábitat natural.
