Cuando Gerardo Franco tenía 20 años decidió dejar atrás Paraguay y mudarse a Barcelona (España) con la idea de trabajar como albañil para poder juntar dinero y cumplir su sueño de viajar por too el mundo.
No era una decisión fácil, ya que más allá de mudarse a cientos de kilómetros, en ese momento no sabía hacer nada, ni siquiera hervir un huevo. Pero eso no lo frenó, y cuando llegó a España se puso a buscar trabajo en el sector de construcción, diciendo que el estaba dispuesto a aprender cualquier cosa.
Y con su plan en mente, sabiendo que todo iba a mejorar, comenzó a trabajar y a ahorrar dinero. Hoy en día está feliz de poder decir que ya viajo a través de 96 países y tiene pensado seguir recorriendo el mundo.
¿Cómo hace? Durante el verano trabaja como albañil, ya que es el es la época en la que mejor pagan en Barcelona. Y durante esos meses también aprovecha para planificar sus viajes, intentando ahorrar lo que más se pueda.
Ya eligió su próximo destino: Malawi.