Con el objetivo de reimpulsar nuevamente el sector turístico tras la crisis económica ocasionada por la pandemia de COVID-19, Nepal anunció durante la jornada de este viernes la apertura de accesos y la habilitación a nuevas expediciones al Monte Everest y a otros 414 picos de la cordillera del Himalaya.
El país asiático había cancelado todas las actividades a realizar en torno a la montaña más alta del mundo a raíz del impacto que el coronavirus había manifestado en la región. Dicha medida había sido tomada al inicio de la temporada turística más convocante, cuando miles de alpinistas se desplazan al Himalaya.
Tal como ha sucedido con otros importantes atractivos turísticos, la decisión de frenar de manera inesperada la actividad en la zona provocó una pérdida de millones de dólares para la economía en Nepal, como así también devino en el despido de miles de nepalíes.
En alusión a eso último, cabe destacar que, según el informe anual presentado por el Consejo Mundial de Viajes y Turismo, la industria relacionada con el turismo de montaña aportó al país unos ingresos de 240.700 millones de rupias nepalíes (unos 2.000 millones de dólares) en el año 2018, lo que representa cerca del 8% de su PIB, gracias a la llegada de 1,2 millones de turistas.
Tras el fin del confinamiento nacional la semana pasada, Mira Acharya, del ministerio de Turismo, indicó que ahora Nepal se encuentra ahora abierto «para las actividades turísticas y en concreto el alpinismo y las excursiones«. Según indicaron, los vuelos internacionales con destino a este país no se reanudarán hasta el 17 de agosto.
En cuanto a los requisitos para acceder a realizar las expediciones al Monte Everest, el director de Seven Summit Treks, una de los mayores operadores turísticos del país, Mingma Sherpa, anunció a la agencia de noticias EFE: «Estamos esperando la decisión del Gobierno sobre si los turistas extranjeros que viajen a Nepal necesitarán certificados de una prueba PCR para ingresar en el país o si tendrán que pasar ciertos días en cuarentena«.
La «reapertura» de la zona nepalí del Himalaya se anuncia coincidiendo con una situación sanitaria marcada por la detección de más de 1.000 casos de coronavirus en la última semana. Así, Nepal ha registrado un total de 19.547 casos positivos de COVID-19 desde el inicio de la crisis.
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