Escalofriante noticia: veterinarios daneses han comenzado a sacrificar desde este lunes 12 de octubre unos 2,5 millones de visones infectados con coronavirus en el norte de Dinamarca. Así lo han reportado autoridades, tras haberse registrado casos de ejemplares infectados en al menos 63 criaderos locales.
Parece mentira pensar que, a mediados de mayo, las autoridades sanitarias danesas anunciaban por controlada la epidemia de COVID-19 en el país nórdico y expresaban que consideraban “muy improbable” que se pueda ver afectado por una segunda oleada del virus. Pero, definitivamente, ante esta nueva pandemia no está todo dicho y Europa todavía no puede cantar victoria al respecto. Y, en el caso de Dinamarca, hasta los visones se verán afectados por las consecuencias letales que ocasiona el virus.
Cabe destacar que Dinamarca es uno de los mayores exportadores de visones del mundo y produce alrededor de 17 millones de pieles al año. Kopenhaguen Fur, una cooperativa de 1.500 criadores daneses, representa el 40% de la producción mundial de visones. La mayoría de sus exportaciones tienen como destino China y Hong Kong.
Ahora, ante un escenario de gran cantidad de visones infectados con coronavirus, profesionales asumen que la pandemia de coronavirus podría “poner en riesgo a toda la profesión”. Como ha expresado Tage Pedersen, presidente de la Asociación de Criadores de Pieles de Dinamarca, “en estos momentos, todos los criadores tienen una gran incertidumbre y frustración por el ‘meteoro’ que nos ha caído en la cabeza”.
Si bien los científicos aún intentan dilucidar cómo fue que los visones se infectaron y si realmente podrían contagiar a las personas, Dinamarca ha tomado el modelo de países cercanos. Como ser, en Holanda, las autoridades informaron que algunos empleados se contagiaron luego de los visones. Precisamente allí, desde el mes de agosto, se ordenó poner fin a la crianza de visones por tres años a partir hasta 2021 en medio de un incremento en el número de infecciones de coronavirus en los criaderos de pieles.
Por su parte, en Dinamarca, la Administración Danesa de Veterinaria y Alimentos es la responsable de sacrificar a los ejemplares infectados, mientras que los criadores que poseen animales saludables en instalaciones ubicadas en un radio de 8 kilómetros (5 millas) de una granja infectada deben sacrificar ellos mismos a sus visones, informó Flemming Kure Marker, de la agencia gubernamental.
“Estamos procediendo, lo vamos a hacer”, detalló la Administración Danesa de Veterinaria y Alimentos sobre el sacrificio que comenzó el jueves en la localidad de Gjoel, al oeste de Aalborg. Añadió que el proceso podría tomar varios meses, dependiendo de la propagación del virus.
Por el momento no se ha dado a conocer el número de animales que ya han sido sacrificados.
Si quieres conocer más sobre lo que sucede en el mundo, ¡síguenos en Instagram!
