‘¿Imaginas una persona muerta a causa del coronavirus cada 27 horas?‘, leí entre una de las tantas publicaciones desde Argentina que asomaron ayer en las redes sociales. Intenté, por un momento, imaginarlo. Habría pánico, desesperación. Quizás, sobre todo, también habría paranoia: ¿quién será el próximo en morir?.
El mensaje continuaba con el siguiente remate: ‘Entonces, sería todo un caos… Lástima que no existen tantas muertes por coronavirus, y que, lo que ocurre cada 27 horas es que muere una mujer víctima de violencia de género en el país‘. Lástima, también, que los medios de comunicación no abusan de la placa de ‘Último momento’ y ya no se ve una noticia que asegure «Confirmaron el caso n° quiénsabecuántosvan de femicidio en Argentina«. Mucho menos nadie pide a un ministro del gobierno explicando qué pasó en conferencia de prensa. Y mucho menos nadie cataloga al machismo como un virus, si es que acaso no cabería esa definición para algo que es capaz de envenenarnos y de propagarse ilimitadamente.
Entonces… ¿cómo no sumirse en un estado de paranoia? Si entonces muchas estarán preguntándose quién podría ser la próxima. Si hay algo que vino a instalar el feminismo de este siglo XXI es que la lucha de las mujeres requiere de una unión entre nosotras, todas. Fomentar el respeto, ser solidarias o mejor dicho ‘sororas’. Expresión por la cual muchas mujeres, además de exigir un mejor futuro para ellas mismas, salen a alzar la voz en representación de aquellas que no pudieron hablar, que fueron víctimas de parejas, familias y un sistema machista que las oprimió, al punto tal de que perdieran la vida como consecuencia.
Durante la jornada del domingo 8 de marzo, millones de mujeres salieron a la calle con una consigna clara y concisa. Al diablo con el día de ‘feliz’ y ‘celebración’, cuando lo más importante es hacer uso de una fecha tan especial como esta para comprometerse a dar v-i-s-i-b-i-l-i-d-a-d. Entender, quizás, que ese empoderamiento nace de la conexión y empatía que somos capaces de establecer entre nosotras. A fin de cuentas, ‘Ni una menos’ es lo que todas queremos. que establecemos
Así fue como las mujeres de muchos y diferentes países, de muchos y diferentes estados, de muchas y diferentes edades, de muchas y diferentes clases sociales, de muchas y diferentes, de muchos y diferentes intereses y gustos, salieron a las calles el domingo para comenzar una protesta que, en algunos casos consistió en jornadas de dos días. Por un lado, la convocatoria a movilizarse el domingo 8 de marzo y por otra parte la invitación de unirse el lunes 9 de marzo ante un huelga nacional de paro laboral para manifestarse en busca de la igualdad de derechos en las mujeres en sociedades que se han desfigurado por la violencia y el machismo.
Acompañadas de vestimentas, accesorios, maquillajes en tono morado, color representativo y símbolo de lucha por la igualdad de las mujeres, y por tanto, emblema del Día de la Mujer, y en algunos casos también del color verde, tono que se ha consolidado como distintivo ante la lucha de las mujeres por el derecho a decidir sobre sus cuerpos.
Como si se tratara de una conspiración de la naturaleza a favor de la situación en la que se encuentran muchas mujeres, en la siguiente imagen tomada en Ciudad de México se puede observar cómo las plantas de jacarandá se fusionan con los destellos de tono morado visibles en las personas presentes en la marcha:
Ahí les va un hilo con todas las fotos que tomé hoy en la CDMX.
— Montserrat (@mon_arce) March 9, 2020
¿Qué sería de nosotras sin nosotras?#8M pic.twitter.com/bZujUCoJ7N
Las imágenes a continuación dan cuenta de lo que ocurría en Madrid, visibilizado por personalidades famosas como la cantante argentina Lali Espósito, quien encontrándose de viaje en tierras españolas también ha decidido participar de las movilizaciones que se han realizado en el mundo:
Barcelona fue otra de las ciudades españolas en sumarse al #8M ????
Por su parte, Paulina Goto, actriz y cantante mexicana, también ha asumido su rol como mujer y figura pública, haciendo uso de la oportunidad para dar visibilidad a la causa:
Sin nosotras no hay ciencia #8M pic.twitter.com/nXBS3LvL8X
— C100 (@C100_FEUU) March 9, 2020
