La llegada de un nuevo año se vive de maneras distintas según cada ciudad, región y país. Aferrados a tradiciones y/o rituales que llevan años o enraizados en prácticas de gran importancia para las comunidades, cada quien celebra de manera particular un nuevo comienzo del calendario.
Un caso ejemplar de lo anteriormente mencionado es Italia. Allí, precisamente en el interior de la ciudad capital de Roma, algunos habitantes italianos se dan cita en elPuente Cavour, situado sobre el río Tiber.
La tradición, que se remonta al año 1946, indica que con el cumplimiento de las 12:00 en punto del día 1° de enero, deben lanzarse a las aguas del río Tiber.
El ritual se dio inicio cuando un socorrista que se encontraba sin empleo saltó desde el puente hacia el río para demostrar sus habilidades profesionales. Desde entonces, muchos italianos han replicado la acción para dar la bienvenida al nuevo año.
En esta oportunidad, celebraron la llegada del 2020 con banderas italianas y adornos de los colores verde, blanco y rojo. Lo cierto también es que el frío resultó un enemigo de quienes practican este ritual, ya que la jornada comenzó con temperaturas apenas por encima de los 0°C. Sin embargo, uno de los protagonistas en saltar al agua indicó que «este evento te alienta y te ayuda a no sentir el frío gracias a la participación de la gente”.
Allí, al menos cuatro hombres se tiraron al agua. Uno de los primeros en realizar el salto fue Maurizio Palmulli, apodado «Mr Ok», un veterano de 67 años, quien indicó que desde hace 32 años cumple con el tradicional ritual.
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Hay algo que distingue a la ciudad de La Plata, capital de la provincia de Buenos Aires (Argentina), más que la perfecta planificación de su trazado urbano. Hay algo más que la distinción que recibe por sus diagonales, por la presencia imponente de la Catedral de la Inmaculada Concepción -también conocida como Catedral de La Plata-, por la atractiva República de los Niños, por la circulación de miles y miles de jóvenes que se radican allí para adentrarse en las aulas de una de las universidades más importantes de Argentina.
Es algo que despierta emoción, alegría y, sobre todo, sentido de pertenencia, casi tanto como el fanatismo por el Club de Gimnasia y Esgrima (GELP) o el Club de Estudiantes de La Plata (EDLP). Aunque de lo que hablamos no presenta una frecuencia de juego cada fin de semana, y los fanáticos de esta tradición deben esperar la celebración de la llegada de un nuevo año para experimentarla. Continuar leyendo…
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