Todos hemos soñado alguna vez con correr entre los valles como Heidi, o esquiar en los Alpes rodeados de montañas y de las mejores pistas del mundo o incluso disfrutar de una aventura excursionista en uno de los países naturalmente más bellos del mundo. Por eso es que en este post combinaremos todo eso y lo “bajaremos a la tierra” en Grindelwald, una aldea suiza ideal para vacacionar en todos los aspectos posibles.
Grindelwald: una “típica” aldea suiza con encanto de pueblo
Pensar en Suiza es pensar en pueblos alpinos con montañas de fondo, construcciones en madera, un rico chocolate caliente y algo dulce para acompañar el día.
Grindelwald recoge todo eso y mucho más, siendo uno de los destinos elegidos por los europeos para vacacionar gracias a sus facilidades, atractivos, servicios y lugares para visitar dentro de las inmediaciones de un pueblo que tiene mucho que contar.
¿La razón? Un destino cosmopolita
Según la mayoría de los viajeros que ya han visitado Grindelwald, este pueblo es un lugar ideal para vacacionar gracias a la oferta de atractivos con los que uno se puede encontrar. Es ese lugar donde alguien diría “hay algo para todos los gustos”, reflejando su diversidad en cada uno de los aspectos posibles.
En otras palabras, en Grindelwald, un viajero puede encontrarse con pistas de ski, clubes nocturnos, parques de golf, centros comerciales, senderos de excursionismo y miradores con vistas panorámicas dentro de la propia ciudad.
Más allá de la diversidad de “preferencias viajeras” de cada turista, todo aquel que visita Grindelwald acuerda en lo mismo: la belleza natural. Tanto es así que el valle formado por los Alpes en Grindelwald fue declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, integrando el Monte Eiger, la ladera del poblado.
En invierno
Como toda persona que piensa en Suiza, es muy probable que (además de los chocolates y los relojes) la primer imagen que llegue a su mente son: pistas de ski. Al igual que varios sectores del país, Grindelwald es uno de los lugares elegidos por los esquiadores para disfrutar de las mejores pistas y no para menos, la «aldea» es uno de los lugares con mayores kilómetros de pistas de ski de toda la región.
Con postales de fondo como el mítico Monte Eiger (el símbolo de la ciudad), los esquiadores pueden ascender a las pistas en teleférico donde, en solo cuestión de minutos, pueden llegar a grandes alturas. Lo mejor: la ciudad está preparada para los esquiadores con una amplia oferta hotelera y gastronómica pensada para los cansados deportistas hacia el final del día.
En verano
No todas las ciudades “de esquiadores” son igual de atractivas en épocas que no hay nieve, aunque Grindelwald es la excepción. Durante el verano, la temporada es aun alta permitiendo a los viajeros transitar por los senderos de excursionismo y trekking en la ladera de los Alpes, en los valles y en los distintos sitios aledaños a la ciudad, integrando casi 300 kilómetros de recorrido en los diferentes aspectos y lugares.
Los caminos incluyen, desde visitas a lagunas y saltos de agua, túneles y galerías encavados en la roca, gargantas de glaciares y vistas panorámicas hacia el propio valle.
Dato viajero: en invierno también pueden hacerse excursiones de senderismo, caminando sobre la nieve utilizando raquetas: todo un desafío para los viajeros pero definitivamente una experiencia inolvidable.
¿Cómo visitar Grindelwald?
Suiza es un país con muchas facilidades para los turistas, donde los transportes públicos forman parte de la vida diaria de los viajeros, con opciones de rutas y horarios, ideales para los más planificadores.
En este caso, llegar a Grindelwald no es complicado en absoluto, lo que hay que hacer es tomar un tren desde Zúrich o Ginebra (los sitios más turísticos del país), hasta la estación Grindelwald, claramente el sitio de entrada para los viajeros que visitan la aldea.
Un descanso «con vista» para los menos aventureros
¿Por qué viajar a Grindelwald debería implicar hacer actividades? Claro que los deportes de invierno y verano se destacan dentro de la cartera de opciones que ofrece Grindelwald pero para quienes utilizan sus viajes para descansar, entonces una visita al poblado también es una gran opción.
Como en muchos otros posts hemos aclarado, hay ciudades y lugares del mundo donde no se necesita “un listado sobre los sitios imprescindibles que visitar en…”, sino que el simple hecho de caminar por sus callecitas, buscar los miradores y perderse en los rincones ocultos, forman parte de “los imprescindibles” de, en este caso, Grindelwald.
Los miradores y las vistas naturales están presente en todo el sitio y permite a los viajeros, además, ascender a los teleféricos para poder mirar “ese algo más” dentro de la propia ciudad, sin esfuerzos ni cansancios.
Grindelwald, un lugar que, sin importar la época del año, sorprende a cada viajero que lo visita.