Todos saben que Costa Rica es un paraíso natural, un sitio donde la naturaleza reina por sobre el resto de los atractivos y donde la cultura local influye tanto como el propio sitio para brindar la autenticidad buscada por los viajeros.
En este post les contaremos acerca de Manzanillo: un verdadero paraíso caribeño donde los locales caminan descalzos por las calles, donde la naturaleza “invade” de tal manera que los viajeros quedan deslumbrados por las playas de aguas transparentes y donde la palabra estrés, no existe.
¿Qué es Manzanillo?
Manzanillo es el nombre de un pequeño pueblo pesquero ubicado en el Refugio de Vida Silvestre Gandoca-Manzanillo, en el pueblo de Puerto Limón, en la provincia de Limón. Para ubicarse un poco mejor, el pueblo se encuentra a poco más de 4 horas de San José, la capital de Costa Rica.
Manzanillo es un pueblo donde la naturaleza abunda y los pocos residentes que viven en la zona, residen en un lugar donde la contaminación es prácticamente nula, donde se puede aprovechar el clima y la vegetación al máximo, sin dañar ni perjudicar.
Un lugar donde es habitual cruzarse con turistas y locales caminando descalzos por la calle, donde una visita a la playa es tan usual como ir a comprar al supermercado y donde el reggae es la música que se escucha en cada esquina, combinando a la perfección con la cultura afro-caribeña que se destaca en los simpáticos residentes.
Manzanillo es ese lugar que parece desconocido pero que, con un par de días de estadía, se vuelve un hogar para quien lo visita y que muchos han elegido para vivir por no poder “despegarse” de sus playas y espacios tranquilos.
¿Qué hacer en Manzanillo?
Las actividades del pueblo rondan 100% a la naturaleza, es decir, que visitar Manzanillo implica playas, senderos en la naturaleza y biodiversidad de la que uno prefiera. Entre las distintas actividades para hacer en Manzanillo, se destacan:
- Parque Nacional Cahuita: un parque donde los senderos y la jungla se relacionan de tal forma que, además de sentirse Rambo caminando entre los árboles, los senderos terminan en playas casi vírgenes con aguas cristalinas.
- Playa Punta Uva: casi como una postal, esta playa se encuentra en el recorrido entre Manzanillo y Puerto Viejo (todo queda muy cerca) y es esa típica playa caribeña con palmeras, arena y agua transparente.
- Refugio Nacional Gandoca Manzanillo: como lo dice su nombre, es un refugio, esto significa que hay poca señalización pero la naturaleza está prácticamente virgen.
- Visitar delfines en libertad: como si a Manzanillo le faltara algo más natural, en las costas de Punta Mona, a pocos minutos del pueblo. Allí salen algunos tours en barco para poder esperar a los delfines en altamar y deleitarse con sus juegos y saltos.
- Buceo y snorkel: como repetimos en varias oportunidades, Manzanillo cuenta con playas donde el agua es cristalina y la visibilidad permite a los viajeros disfrutar de actividades como snorkel y buceo y disfrutar de la variedad de peces, colores, animales y plantas acuáticas.
¿Cómo llegar a Manzanillo?
Como te contábamos en un principio, el pueblo de Manzanillo se encuentra a solo 4 horas en vehículo de San José, esto hace que la mayoría de los viajeros lleguen a la gran capital y de allí se trasladen a Manzanillo, pudiéndose alojar en el pueblo, en Cahuita o incluso en Punta Uva donde, gracias al turismo, se han desarrollado distintas variedades de alojamiento como hoteles, cabañas y hostels.
A pesar de la cercanía con la capital, es recomendable alojarse en el pueblo por algunos días para poder disfrutar de la naturaleza, del descanso en las playas y de la vida nocturna de Manzanillo, que da que hablar.
En cuestiones de alojamiento, la búsqueda no es extensa ya que es un pueblo pequeño pero turísticamente activo, no solamente por el atractivo natural que atrae a viajeros de todas partes del mundo, sino que muchos hoteles pertenecen a europeos que han quedado enamorados del sitio y han decidido invertir en el pueblo.
¿Dónde comer en Manzanillo?
El pueblo no cuenta con una gran variedad gastronómica, la mayoría de los turistas visitan Maxi´s que se lleva la fama y popularidad del pueblo aunque, según la opinión de algunos viajeros, el valor de los platos puede ser algo elevado comparado a otros sitios “más escondidos” y más autóctonos.
La segunda opción para poder comer es dirigirse a la pequeña ciudad de Puerto Viejo, ya que al ser algo mayor, hay más variedad de platos y posibilidades.
Independientemente del lugar que se elija para poder comer, lo único que ningún turista puede perderse de degustar son los famosos mariscos y su variedad de formas de preparación.
Manzanillo, ese lugar que buscan los viajeros para vivir la vibra de Costa Rica, donde la naturaleza logra “bajar las revoluciones” de la rutina y donde la buena energía de los locales no hace más que condimentar agradablemente el viaje.
Agradecemos la foto de portada: Jean-François Renaud
