En un nuevo restaurante McDonald’s que acaba de abrir en Walt Disney World Resort en Florida, Estados Unidos (con medidas de protección COVID-19 implementadas), los paneles solares que cubren el techo y los paneles de vidrio solar en todo el edificio están diseñados para generar suficiente energía para que el restaurante pueda funciona con energía 100% renovable.
Funcionando completamente con energía renovable, o alcanzando una meta de uso de energía «neto cero», «todavía está en la vanguardia tecnológica de los edificios», dice Carol Ross Barney, directora de Ross Barney Architects, la firma que dirigió el diseño del local nuevo.
Este restaurante servirá como un laboratorio para McDonald’s para probar soluciones de sostenibilidad que la compañía luego puede replicar en otros lugares, incluidos los nuevos equipos de cocina que pueden ayudar a reducir el uso de energía. «Para un restaurante, el mayor uso de energía es en la cocina, especialmente en un restaurante de gran volumen como este en Disney World», dice ella. La compañía probará nuevos equipos para cocinar hamburguesas que pueden ponerse en espera cuando haya menos clientes (los equipos más antiguos tenían que seguir funcionando) y nuevos refrigeradores y congeladores que sean lo más eficientes posible.
En el comedor McDonald’s de energía neta cero, un sistema de ventilación pasiva hace circular el aire para mantener el espacio cómodo sin tener el aire acondicionado encendido la mayor parte del tiempo.
«Estábamos realmente interesados en aprovechar el clima en Florida, que es la mayor parte del año fantástico», dice Ross Barney. «Realmente no es necesario acondicionar el aire. Podrías sentarte afuera, y en la mayoría de los casos adentro, sin aire acondicionado ni calefacción ”.
Las ventanas unidas al sistema de energía del edificio se abren automáticamente cuando la temperatura y la humedad son cómodas, y los ventiladores se encienden automáticamente. Un gran porche para comer al aire libre, que no es una característica común de un restaurante de comida rápida, tiene tantos asientos en el exterior como el comedor interior. (Actualmente, el restaurante solo ofrece opciones de entrega y drive thru en automóvil, pero abrirá, llevará a cabo y servirá un servicio de cena en una fecha posterior).
«Esperamos que eso les dé a las personas el ímpetu para comer afuera y aprenderemos cómo no usar energía», dice ella.
Al reducir drásticamente el uso de energía, el diseño hace posible alimentar todo el restaurante de 2,500 metros cuadrados con solo los paneles solares en el techo, junto con la tecnología solar incrustada en vidrio que proporciona sombra sobre el área para comer al aire libre.
Al igual que con la mayoría de la energía solar, los paneles envían energía de vuelta a la red local en lugar de alimentar directamente el restaurante, pero la cantidad total de energía generada es igual a la que utilizará el restaurante durante un año. La compañía planea obtener una certificación de «energía cero» del International Living Future Institute durante el próximo año.
Si bien la tienda está diseñada como un piloto, con características adicionales como bicicletas generadoras de electricidad que los clientes pueden montar para iluminar los arcos dorados sobre la tienda y juegos en las mesas que enseñan a los niños sobre la electricidad renovable, muchos de los elementos del diseño se puede incorporar fácilmente en otro lugar.
«McDonald’s no se dará la vuelta mañana y les dirá a todos los franquiciados que deben tener y colocar paneles solares en toda su tienda«, dice Ross Barney. «Pero sí creo que habrá algunas aplicaciones que se pueden usar en todas las tiendas, y se usarán en todas las tiendas, en el futuro». A medida que el costo de la energía renovable continúa disminuyendo, es probable que se vuelva más común en los restaurantes.
Las metas de McDonald’s paa el 2030
El edificio está ubicado cerca de los All-Star Resorts en la propiedad de Disney.
Este nuevo diseño de restaurante es un paso hacia el objetivo de McDonald’s basado en la ciencia para reducir las emisiones de acuerdo con los objetivos del acuerdo climático de París; para 2030, sus emisiones de restaurantes y oficinas deberán caer un 36% en comparación con 2015. La compañía también está invirtiendo en proyectos de energía renovable fuera del sitio a gran escala. En 2019, comenzó a comprar energía eólica y solar de plantas masivas en Texas que generan suficiente electricidad para abastecer a 2.500 de sus restaurantes.
