Miami podría construir un muro de 10 metros de alto para proteger a la ciudad del cambio climático

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La costa este de Estados Unidos se está hundiendo hasta 3 milímetros cada año, y Florida, ubicado en la región más meridional del país, es uno de los estados más afectados por la creciente marea.

Incluso la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica (NOAA por sus siglas en inglés) predijo que las calles de la ciudad de Miami quedarán inundadas para el año 2070. 

Inevitablemente, los cambios irreversibles del nivel de mar afectan tanto a playas, como distritos comerciales y hasta franjas de cultivo. 

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Al mismo tiempo, la fuerza de los huracanes ha aumentado debido al cambio climático, junto con la amenaza de mareas de tormenta. Miami fue señalada como una de las ciudades más vulnerables del mundo según un informe de Resources for the Future.

Ante esta situación, el Cuerpo de Ingenieros del Ejército de los Estados Unidos ha propuesto un plan que consiste en instalar compuertas contra tormentas en tres vías fluviales principales que desembocan en la Bahía de Biscayne en la costa de Miami.

El plan requiere un sistema de protección contra sobretensiones de $4.6 mil millones para mantener seguros a los 2.8 millones de personas que viven en el condado de Miami-Dade.

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El río Miami, una importante vía comercial, estaría entre las vías fluviales protegidas por las compuertas. Además, el plan instalaría bombas y muros de contención a lo largo de la costa de la ciudad, con una altura de 4 metros.

En el centro, un muro de hasta 10 metros de altura podría elevarse desde el suelo de la Bahía de Biscayne para proteger el centro de la ciudad. Por el momento, el plan no se completará hasta 2021, ya que primero debe obtener la aprobación y la financiación de los funcionarios del gobierno nacional y local.

Los residentes y trabajadores locales se oponen a esta medida, preocupados por perder sus vistas del océano, así como también los grupos de conservación que optan por soluciones más naturales como el aumento de la salud de los arrecifes y las costas con biodiversidad.

Recordemos que durante el último mes de enero, decenas de camiones vertieron miles de toneladas de arena blanca en Miami Beach. Por ley, el Cuerpo de Ingenieros sólo puede usar arena estadounidense. La que está siendo vertida en Miami Beach viene del oeste de Florida y, de acuerdo al contrato, debe ser natural, consistir predominantemente en carbonato o cuarzo y medir entre 0,062 mm y 4,76 mm de diámetro.

El proyecto también requirió la protección de los nidos de tortuga, o su relocalización si es necesaria.

Esta sería la solución provisoria del gobierno de Estados Unidos a la erosión producida por el aumento del nivel del mar en uno de los destinos turísticos más populares de Florida.

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