¿Por qué desaparecen barcos y aviones en el Triángulo de las Bermudas?

A lo largo de toda  la historia son decenas los barcos y aviones que han desaparecido en esta infame zona del Océano Atlántico. Cuando esto sucede, sólo quedan detrás unas pocas pistas o rastros de lo sucedido. Es por esto que es casi imposible determinar con exactitud cuál es el verdadero motivo. ¡Pero haremos un intento!

Increíblemente, el Triángulo de las Bermudas comenzó a ganar fama en la época de Cristóbal Colón. En ese momento ya se registraban casos extraños de barcos o tripulaciones perdidas. Y eso continúa al día de hoy.

Una de las desapariciones más conocidas fue la de un barco mercante llamado Mary Celeste. La nave zarpó el 7 de noviembre de 1872, con la familia Briggs, más una pequeña tripulación a bordo. Iban desde Nueva York hasta Génova. Pocos días después de la última entrada en la bitácora del 25 de noviembre, un barco británico encontró el Mary Celeste flotando en el medio de la nada. Todo parecía normal, con las velas izadas y nada destruido. Tampoco faltaba nada. Nada, excepto por la familia Briggs, la tripulación y el bote salvavidas. Parecía que simplemente se fueron, y abandonaron todo. Es como si se los hubiese tragado la tierra…. o el mar.

Otro caso famoso y mucho más reciente es el del Jet Grumman Cougar. En 1991 un Jet pilotado por John Verde y su copiloto Paul Lucaris volaba sobre el Golfo de México con dirección a Tallahassee, Florida. Atravesaba una tormenta y pidió autorización al control de vuelo para ascender y evitar las nubes. Cuando comenzó la maniobra, todo parecía normal. Pero repentinamente el avión desapareció del radar del Control, de un momento al otro. Cuando intentaron contactarse, no obtuvieron respuesta, ni pedidos de ayuda por parte del Jet. La única señal era la altitud del avión, que extrañamente seguía aumentando cada vez más. Finalmente dejó de llegar esa señal también, y el avión desapareció para siempre en el cielo.

Nadie sabe precisamente dónde está ubicado el Triángulo de las Bermudas. Pero por referencias de navíos, se estima que está al sureste de los Estados Unidos. Florida, Puerto Rico y Bermudas son los extremos que delimitan la zona, ocupando 800,000 kilómetros cuadrados del océano.

En esta zona, hay dos factores que afectan la navegación por aire y tierra: Las tormentas marítimas, y la profundidad del océano. 

Las tormentas no son como cualquier lluvia intensa que vemos normalmente. La lluvia y sobre todo el viento sopla mucho más fuerte, pudiendo llegar a 150 kilómetros por hora. Aquí también se generan las peligrosas Olas Gigantes (Rogue Waves, en inglés). Según el Servicio Oceánico Nacional de los EE.UU., aparecen de forma espontánea durante las tormentas y miden el doble de altura que las olas comunes. O sea que pueden medir hasta 30 metros, superando cualquier embarcación. Esta combinación de lluvia y olas gigantes hace que las tormentas sean mortales. 

Y la profundidad puede explicar por qué se han encontrado tan pocos rastros de barcos perdidos. En el Triángulo de las Bermudas se encuentra el punto más profundo del océano atlántico. Se llama la Depresión Milwaukee y llega a 8,600 metros. Cualquier navío o avión que tenga un problema aquí, se hundirá a tal punto de no ser encontrado.

Más allá de estos factores, aún hay casos o sucesos que tampoco terminarían de ser explicados por estos fenómenos naturales.

Lo que no podemos asegurar, es que no haya un Kraken escondido en el fondo del mar, o Aliens sobrevolando la zona de manera invisible…

Y tú, ¿cuál crees que es la mejor explicación para las desapariciones?