El primer ministro británico, Boris Johnson, había ingresado el pasado 5 de abril al Hospital St Thomas de Londres por presentar síntomas persistentes y agravados de su cuadro de coronavirus.
Con 55 años, el lunes 6 de abril el primer ministro fue trasladado a cuidados intensivos, área donde permaneció hasta el 9 de abril. Ahora, en las primeras horas de este domingo, ha recibido el alta para continuar con la recuperación en su hogar. Allí permanecerá junto a su prometida, que se encuentra en estado avanzado de gestación.
Además, un portavoz de la autoridad indicó que: “Siguiendo el consejo de su equipo médico, el primer ministro no regresará de inmediato al trabajo. Desea agradecer a todos en St Thomas por la brillante atención que ha recibido”.
Así mismo se mostró muy emocionado y agradecido ante la labor de los especialistas del Servicio Nacional de Salud, quienes no sólo actúan con sumo esfuerzo haciendo frente a esta pandemia, sino que han debido velar por su salud también: “No puedo agradecerles lo suficiente”.
Según los últimos datos oficiales, en Reino Unido el avance del coronavirus ha causado hasta 9.875 muertos.
La peor imagen de Nueva York: entierros masivos de fallecidos por Covid-19 en impactantes fosas comunes
Hace unas semanas nos horrorizábamos con la situación que se vive en Guayaquil, Ecuador, debido a la saturación del sistema de salud nacional y la presencia desmedida de personas fallecidas a las cuales, por fuerza mayor, sus familiares debieron dejar en la calle.
Con el paso de los días, Nueva York anunciaba un fatal escenario para sus próximas semanas, lamentando un desmedido avance del brote de contagio de coronavirus entre sus habitantes (que podría haberse evitado si las autoridades dejaban de lado su orgullo y las decisiones se tomaban a tiempo, claro está).
Incluso, se conocían escalofriantes imágenes de camiones “frigoríficos” dispuestos en algunas calles de la Gran Manzana para disponer de un lugar para resguardar los cuerpos de los fallecidos ante el colapso de las morgues locales.
Impactante. La ciudad que “nunca duerme”, y se destaca por sus brillos y luces incandescentes, parece apagarse y teñirse de angustia y desolación.
Ahora, unas imágenes tomadas desde un drone perteneciente a la agencia Reuters, reflejan un triste escenario que se vive en Hart Island, una pequeña isla frente al Bronx. Continuar leyendo…
