Parece que a Uber no le alcanza con convertirse y ser considerada como la empresa estadounidense que llegó a revolucionar la forma en que las personas nos transportamos a nivel internacional. Ahora ha anunciado de manera oficial un verdadero desafío a alcanzar en las próximas décadas: convertirse en una plataforma de movilidad de cero emisiones para 2040.
Esta ambiciosa iniciativa contemplará también la ejecución de todos sus viajes a través de vehículos de cero emisiones, transporte público y dispositivos de micro-movilidad a medida.
Según ha indicado a través de sus canales oficiales de comunicación, la marca invertirá unos 800 millones de dólares para permitir que cientos de miles de conductores en Europa, Estados Unidos y Canadá se cambien a un vehículo de cero emisiones. Así mismo, para 2025 estiman que el 50% de los kilómetros recorridos en la plataforma de Uber en destinos como Ámsterdam, Berlín, Bruselas, Lisboa, Londres, Madrid y París se realicen en vehículos de cero emisiones.
A partir de cálculos ha sido posible identificar y anticipar que el compromiso de Uber para con el uso de los vehículos eléctricos en el continente europeo permitirá ahorrar unas aproximadamente 500.000 toneladas de emisiones de carbono, el equivalente a eliminar las emisiones de CO2 de 275.000 automóviles privados de las carreteras.
Es en alusión a ello que la gerente general regional de Uber para EMEA, Anabel Díaz, sostiene: «Como la plataforma de movilidad más grande de Europa, tenemos un papel importante que desempeñar para abordar el cambio climático y apoyar una recuperación ecológica. Teniendo en cuenta nuestras responsabilidades para con los conductores, los pasajeros y las ciudades, hoy hemos asumido una serie de compromisos ambiciosos para ayudar a promover la electrificación de nuestra plataforma en toda Europa. A medida que establecemos nuestra hoja de ruta para convertirnos en una plataforma de movilidad de cero emisiones para 2040, Europa liderará el camino al ofrecer cambios impactantes en los próximos cinco años«.
Por lo pronto, la compañía continúa firme en su propuesta de Uber Green, un proyecto que promueve la sustentabilidad a partir de ofrecer a los pasajeros la posibilidad de solicitar transporte de bajas emisiones por un pequeño recargo. Para fines del próximo año, anhelan aumentar este servicio y extenderlo de 37 ciudades a 60. Así, supondrá el 80% del negocio europeo de Uber.
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