El zoológico de Oakland, en California, Estados Unidos, está vacunando a algunos de sus animales contra el COVID-19 utilizando una vacuna experimental que fue realizada especialmente para animales.
Los primeros animales del zoológico en recibir la vacuna fueron dos tigres, llamados Ginger y Molly. La razón por la que ellos dos fueron elegidos es porque los grandes felinos son más susceptibles a contraer el virus, según informó el sitio de noticias The New York Times.
Por el momento, la institución ha dado las dosis correspondientes de la vacuna a tigres, osos pardos, osos negros, pumas y hurones. A pesar que ninguno de los animales del zoológico de Oakland se ha contagiado del virus, las autoridades decidieron administrar la vacuna como una forma de precaución.
Alex Herman, vicepresidenta de servicios veterinarios en el zoológico de Oakland explicó que ha habido casos en los que los animales desarrollaron síntomas moderados, otros que se enfermaron gravemente y otros hasta murieron, «y eso es por qué estamos siendo tan proactivos».
Es importante tener en cuenta que muchos de los animales que se encuentran en esta institución son especies que se encuentran en peligro de extinción. Por eso eso que los cuidadores del zoológico desarrollaron un «plan de supervivencia de especies», que incluye la vacunación de estos animales contra una potencial enfermedad.
Según informó The New York Times, este zoológico de California que ya está vacunando a sus animales contra el COVID-19 planea administrar las dosis a alrededor de 100 de ellos. Esta vacuna fue desarrollada por Zoetis, una compañía que se dedica a la salud animal y está donando más de 11.000 dosis de la vacuna a unos 70 zoológicos de Estados Unidos, así como también a organizaciones como santuarios y otros lugares de cuidado animal.
Respecto a cómo es el proceso para los animales, Herman explicó al medio de noticias San Francisco Chronicle que la vacuna contra el COVID-19 es como cualquier otra. Los animales están acostumbrados a recibir cuidados preventivos, como es este caso, y están entrenados para «participar voluntariamente en su cuidado médico» mediante estímulos positivos.