Elephant Jungle Sanctuary es un hogar seguro para los elefantes en Tailandia. Todos los elefantes que viven ahí han sido rescatados de los campamentos de trekking u otras prácticas dañinas, como la tala o circos. El santuario no permite a los visitantes montar los elefantes. En cambio, puedes pasar el día jugando con ellos, haciendo su comida, alimentándolos, dándoles un baño de barro y bañándote con ellos.
Cómo llegar
Elephant Jungle Sanctuary tiene 2 lugares: uno en el norte de Tailandia, cerca de Chiang Mai, y el otro en el sur de la isla de Phuket. Puedes reservar tu visita a través de su sitio web.
Si vas a visitar Tailandia, probablemente vas a comenzar su viaje en Bangkok. Tanto Chiang Mai como Phuket están un poco más de una hora de Bangkok en avión. El vuelo puede reservarse con una de las muchas aerolíneas nacionales de Tailandia. También puedes tomar un autobús nocturno o el tren nocturno de Bangkok, un viaje mucho más largo (al menos 10 horas o más a cualquiera de los dos lugares), pero ahorrarás dinero.
El santuario situado cerca de Chiang Mai te proporcionará transporte gratuito desde y hacia tu hotel de Chiang Mai. Si vas al de Phuket, el transporte gratuito lo ofrecen desde ciertas partes de la provincia , te conviene consultarlo directamente con el santuario.
Lo que debes tener en cuenta
- No te olvides de tu traje de baño y ropa extra en la mochila. Te la vas a pasar jugando en el barro y en el agua con los elefantes.
- Protector solar y repelente de insectos también son importantes, ya que estarás pasando todo el día al aire libre.
- El almuerzo está incluido en el precio de la entrada, si necesitas un menú especial es importante que avises antes de tu visita para que lo tengan en cuenta.
- Si quieres sacar fotos es importante que tu cámara sea impermeable ya que vas a estar rodeado de barro casi todo el día. Si no tienes una cámara apta no te preocupes, ya que siempre hay un fotógrafo profesional junto con el grupo (después las suben a la página web).
Hablemos de dinero
La visita al santuario cuesta entre 50 y 100 dólares aproximadamente, dependiendo de cuánto tiempo te quedes. También puedes participar en su programa nocturno, que cuesta un poco más pero vale la pena. Todo el dinero de los visitantes es destinado a ayudar a los elefantes: rescates, alimentación, atención veterinaria y mantenimiento del santuario.
