Además de sus playas de arena blanca y su deliciosa comida callejera, Tailandia también es famosa por su flor de loto, un símbolo sagrado que se puede encontrar en todas partes del país: desde el interior de los templos, hasta apiladas en los puestos de los mercados locales.
Dada la belleza de los lotos que florecen, no es de extrañar que los estanques donde crecen se han convertido en destinos súper visitados. Sin embargo, a los turistas se les está pidiendo que no visiten un lago en particular, donde decenas de miles de lotos de color rosa florecieron a lo largo de la superficie del agua a principios de este mes, por primera vez después de 10 años.
El pantano de Khao Sam Roi Yot, ubicado a tres horas de Bangkok en el Parque Nacional Khao Sam Roi Yot, no había visto una sola floración de loto desde alrededor del 2007, algo que las autoridades han atribuido a una combinación de sequía y contaminación (en 2016 se pensaba que el pantano estaba en su peor condición en 30 años). Ahora que las flores han regresado, la AFP informa que existen preocupaciones debido a su fragilidad, y tanto a los turistas como a los locales se les ha dicho que se mantengan alejados para dar tiempo al lago para rehabilitarse.
«El parque nacional está en proceso de restaurar los lotos», dijo Rungroj Aswakultarin. «Cuando llegue el momento adecuado el parque volverá a abrir sus puertas al público».
Mientras tanto, a los guías de turismo, que a menudo organizan para llevar a los viajeros a ver las flores de cerca en el lago a través de botes de remo, se les ha dicho que se mantengan alerta hasta nuevo aviso. Se espera que la próxima temporada de monzones ayude a la zona a recuperarse más.
Hay muchas razones para visitar el Parque Nacional de Khao Sam Roi Yot: copiosa vida silvestre, grutas subterráneas, playas de barrido y mucho más. Pero aquellos que están desesperados por visitar el lugar, solamente para ver la preciosa flor de loto, no debe sentirse totalmente desanimados, una sección del lago está abierta actualmente a un número limitado de visitantes, y más secciones de él comenzarán a abrirse mientras que el área se vaya recuperando.
En los últimos diez años, el número de visitantes extranjeros a Tailandia ha aumentado de 13,8 millones a 32,5 millones. Algunos lugares en todo el país han comenzado a ser demasiado populares y se han visto dañados… los arrecifes de coral a lo largo de la costa han sufrido daños considerables debido a los visitantes nadando, alimentando pescados, y haciendo snorkeling. En 2016, la isla tailandesa de Koh Tachai anunció que se cerraría completamente a los turistas. Las autoridades implementaron posteriormente una importante reducción de las actividades turísticas en otras tres islas: Koh Khai Nok, Koh Khai Nui y Koh Khai Nai, todas ellas situadas frente a la costa de Phuket. Se piensa también que los efectos del «sobre turismo» han estado acelerando el problema de blanqueamiento de corales en la región.
