Quién no ha visto tantos videos de personas que dejan sus trabajos para recorrer el mundo y querer hacerlo también (admito que también lo he considerado), sin embargo no todo el mundo está dispuesto a tomar tal decisión tan a la ligera, ni todos pueden convertirse en videobloggers de viajes, o recorrer el mundo al dedo. Si tu eres uno de ellos, ¡Permíteme decirte que tienes mi admiración y respeto total!, no cualquiera se atreve a llevar esa vida.
Sin embargo el mundo necesita de todas las profesiones para seguir girando y si tu eres un profesionista o estudiante que está cansado de todo y estás pensando en cómo sería mandar todo al carajo en un arranque, o estas pasando por un mal momento, como NO psicólogo puedo decirte que un viaje siempre será suficiente motivación para levantarte cada mañana a trabajar o estudiar; ningún objeto podrá darte nunca la misma motivación, que imaginar cómo serán los lugares que solo has visto en fotografías o videos, ni cuál será el sabor de ese platillo que viste en una publicación compartida por tu amigo.
Mi primer viaje fuera del país lo hice a los 17 años afortunadamente con mi familia, y después de eso supe que quería conocer más lugares, conocer más gente y probar más sabores. Antes de terminar la carrera universitaria tenía muy claro que quería salir a conocer el mundo, así que trabaje y estudie y al final logré hacer mi primer viaje a Europa solo por casi un mes. Desde entonces llevo 5 años viajando en cada ocasión o vacaciones que tengo, ya sea cerca o lejos, por poco o mucho tiempo, solo o acompañado, el caso es salir y conocer.
Al tercer viaje compre una cámara GoPro y decidí que al terminar mi primer cuarto de siglo tenía que grabar todos los lugares que estaba visitando para recordarme que todo lo que pensé que sería imposible de visitar, no lo es, y poder seguir así motivándome para los siguientes viajes, y quiero compartirles ese video.
Como ya dije, no soy un videoblogger, y admiro a todos aquellos que dedican su vida y tiempo completo a ello (de verdad que envidia y de la buena), y creo que en esta realidad no todos podemos dedicarnos a viajar completa y únicamente por el mundo, pero no hay porque deprimirse por ello, pues si tus prioridades son diferentes, si tu trabajo también es tu pasión, o eres bueno en lo que te dedicas, también puedes dedicar tu dinero y tiempo libre a recorrer y viajar por el mundo.
Al final la motivación es la misma a pesar de que los caminos sean diferentes.
