Los Mercados Navideños de Alemania son conocidos a nivel a mundial. Todos los años millones de personas viajan exclusivamente para recorrerlos, pero este año, por el contexto de pandemia, la situación es diferente. Actualmente el país está enfrentando un aumento en la cantidad de contagios de COVID-19 por lo que muchos de los tradicionales mercados permanecerán cerrados. Frente a esto, Patrick Schmidt, dueño de un mercado navideño que se encuentra en Baviera, pensó una alternativa: organizar todo para que el lugar pueda ser recorrido en vehículo y, de esta manera, poder mantener la distancia social entre las personas.
Patrick Schmidt es dueño y chef de Zollhaus Brauereigaststätte, el mercado navideño que se encuentra en la ciudad de Landshut, Baviera, y fue el encargado de la iniciativa de armar el lugar para que pueda ser recorrido de forma segura en diferentes vehículos. De esta manera no solo se cuida la salud de las personas, sino que mantiene la tradición anual de visitar el mercado para esta época. El mercado abrió por primera vez bajo esta modalidad el pasado jueves, 12 de Noviembre, según informó la agencia de noticias Reuters, y hasta tuvo nieve falsa para mantener la ilusión.
«Fue una idea espontánea consecuencia del segundo confinamiento. Pensé que el recorrido en auto del Dult también funcionó así que ¿por qué no hacer un mercado navideño del mismo modo?«, declaró Schmidt. Cuando habla de ‘Dult’ se refiere al festival folk que se realizó en Baviera cinco meses atrás, para el cual diseñaron un recorrido que pueda realizarse en vehículos. Esto ocurrió durante la primera ola de contagios de coronavirus que estaba teniendo lugar en Alemania y en toda Europa. De ahí fue que el chef pensó que la idea podía funcionar para el mercado navideño también. El chef también explicó que no se trata solo de la comida que pueden llegar a encontrar en el recorrido, «nosotros vendemos una experiencia«, dijo.
Alemania cuenta con alrededor de 2500 mercados navideños que todos los años atraen a millones de turistas pero este año la pandemia los obligo a modificar las condiciones en las que por lo general se desarrollan. Algunos encontraron alternativas mientras que otros, como el famoso mercado de Núremberg, tuvieron que cerrar sus puertas al público.
