Un equipo de científicos chinos descubrió un sumidero gigante que alberga un bosque en sus profundidades. Dicho sumidero tiene 192 metros de profundidad y alberga árboles antiguos de 40 metros de altura, los cuales absorben la luz solar que se filtra a través de la superficie.
Los investigadores del Servicio Geológico de China identificaron este enorme sumidero kárstico en la región autónoma de Guangxi Zhuang, en el sur del país asiático. Sin embargo, no es la primer estructura de este tipo que se encuentra en la zona, el nuevo hallazgo es especialmente importante por su magnitud y características. Es así que la enorme cueva alberga un bosque completo en su interior, con árboles de gran altura, y podría incluso contener especies vegetales y animales desconocidas para la ciencia, ya que podría incluso presentar un microclima propio.
Cabe destacar que los terrenos kársticos son regiones formadas por rocas compactas y solubles, generalmente de origen calcáreo, en las que diferentes procesos de disolución (karstificación, en términos técnicos) van creando estructuras tanto superficiales como subterráneas con unas características notablemente diferentes a las que se observan en otro tipo de regiones. Una de esas estructuras son los sumideros.
Los sumideros son cuevas que se forman por fenómenos naturales. Se desarrollan cuando el agua de lluvia ligeramente ácida va carcomiendo poco a poco el subsuelo, hasta que se crea una cueva subterránea. El agua que continúa filtrándose posteriormente provoca el derrumbe del techo de dichas cuevas, creando finalmente la estructura definitiva del sumidero.
China: otros hallazgos
Según un artículo publicado en Live Science, el sur de China alberga una topografía kárstica, un paisaje propenso a sumideros dramáticos y cuevas de otro mundo. El nuevo sumidero descubierto posee 306 metros de largo y 150 metros de ancho, con una profundidad de 192 metros. La palabra en mandarín para nombrar a estos enormes sumideros es «tiankeng», o «pozo celestial«: el término parece muy atinado, ya que los científicos describieron que el fondo de la cueva en verdad parecía salido de “otro mundo”.
Las personas que participaron del equipo de expedición indicaron que la densa maleza en el suelo del sumidero alcanza la altura de los hombros de una persona. Las cuevas kársticas y los sumideros pueden proporcionar un oasis para la vida: la nueva estructura descubierta presenta árboles antiguos de hasta 40 metros de altura, que sobreviven estirando sus ramas hasta los ingresos al sumidero, donde se filtra la luz del Sol.
Además de un bosque completo, los científicos tienen enormes expectativas ya que creen que la enorme cueva podría estar protegiendo a especies nunca antes identificadas. Se sabe que estos sumideros kársticos son quizás las estructuras geológicas mejor conservadas de la Tierra: la región de Guangxi es conocida por sus fabulosas formaciones kársticas, que van desde sumideros hasta pilares de roca y puentes naturales. Debido a esto, fue catalogada como patrimonio mundial de la UNESCO.
China: Un fenómeno único
Por otro lado, los sumideros y las cuevas no solo son un refugio para la vida, sino que además conforman un conducto hacia los acuíferos o depósitos profundos de agua subterránea. Los «acuíferos kársticos» son la fuente principal de agua para 700 millones de personas en todo el planeta, aunque desgraciadamente son fácilmente accesibles a la contaminación mediante fenómenos de drenado.
Aunque el nuevo descubrimiento eleva a 30 el número de sumideros en esta región de China, otras investigaciones indican que también existen estructuras similares más al norte. De acuerdo a un artículo publicado en China Daily, se han descubierto más de 50 sumideros en la región de Hanzhong: los científicos lo describieron como un milagro en la historia geológica mundial, ya que nadie esperaba que hubiera sumideros tan al norte.