No es ninguna novedad que los restaurantes que están en pleno centro turístico son mucho mas caros que los demás. Caminas y caminas comparando precios pero sabés que es prácticamente imposible encontrar comida barata en plena Plaza de San Marcos en Venecia o en la Champs Élysées parisina.
Pero hay una gran diferencia entre sacrificar unos pesos de más por derecho de piso y otra cosa es ser engañado para pagar más de 600 dólares por una comida. Si, leíste bien. Esto le pasó a Luke Tang durante su último viaje a la ciudad italiana de Venecia.
Él y sus padres se detuvieron en Trattoria Casanova para almorzar antes de volar de vuelta a Inglaterra, y probablemente su comida costó tanto como su pasaje de regreso a casa. Todos ordenaron mariscos e inmediatamente se les sirvió un plato de ostras que no habían ordenado. Dice que cuando se comunicó con el personal, sus quejas fueron ignoradas. Recibieron sus entradas, junto con otro plato gigante de langosta y camarones que tampoco pidieron.
Entonces, llegó la cuenta. Y es increíble lo que vieron: la comida, incluyendo los extras que no pidieron, costó 526 euros (11,750 pesos). Pensaron en acudir a la policía pero como tenían que tomar un avión y no tenían tiempo, decidieron escribir una carta tajante dirigida al alcalde de Venecia, pidiéndole que tome medidas contra los restaurantes que se aprovechan de los visitantes que no hablan italiano:
«No espero un reembolso, pero me gustaría llamar su atención sobre un tipo de comportamiento que podría arruinar la reputación de Venecia».
«No devolvieron nada. Si hubieran sido platos que no pidieron, podrían haberse negado a comerlos y no los hubiéramos cobrado».
Pero el asunto no terminó ahí. El mismísimo alcalde de Venecia, Luigi Brugnaro, fue muy directo en una entrevista para The Telegraph atacando a los turistas: «Son tacaños, alguien come y bebe en un restaurante, y ¿luego dice que no entiende el idioma?». Él opina que los Tang deberían haber sabido que comer en Venecia es caro, además que deberían haber dejado propina.
Y este no es el único caso. Trattoria Casanova ya ha engañado a los turistas durante mucho tiempo. Muchos usuarios molestos de TripAdvisor contaron que en muchas ocasiones los clientes reciben platos adicionales que nunca ordenaron y se asombran con el precio del pescado fresco que es por cada 100 gramos. Ah, y el restaurante agrega un descarado 12 por ciento adicional por el servicio, así que dejas propina quieras o no
Un crítico contó que escuchó cómo le decían a un mesero que le entregaran a alguien platos que no ordenó, los devolvió y lo amenazaron con llevarlo a la policía si no los pagaba (no lo hizo). Otro dijo que le cobraron por un agua mineral que se suponía era gratuita y también le cobraron un lenguado de 168 euros (195 dólares). Las quejas son interminables y casi idénticas: otro almuerzo de 270 dólares, un pescado de 248 dólares y una infartante fuente de pescados de 932 dólares (yo me hubiera tirado de cabeza al canal).
Así que sí, lo mejor es que evites la Trattoria Casanova durante tu próxima parada en Venecia.
